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20 de abril de 2024
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Sand, goleador del campeón
El delantero tuvo su merecido premio al coronar su gran etapa como goleador de Lanús con un título. Se autodefine como un "laburante" del fútbol. Su carrera
2 de diciembre de 2007
El delantero José Sand tuvo hoy su merecido premio al coronar su gran etapa como
goleador de Lanús con un ansiado título, ya que fue uno de los artífices para que el equipo lo lograra.

El atacante se terminó de meter en el corazón de la gente "Granate" al abrir el marcador frente a Boca, en el gol que valió nada menos que el primer título para el equipo que dirige Ramón Cabrero.

Sand consiguió acá el reconocimiento y la gratitud que prácticamente nunca había podido lograr en otros clubes de Primera División, pese a que el empeño y a su capacidad goleadora.

Su misión no era fácil al llegar al club, porque venía con su diploma de artillero implacable pero debía revalidarlo como reemplazante de Claudio Graf, que tenía a los hinchas acostumbrados a siete u ocho tantos por certamen.

Pero "Pepe" cumplió y no sólo por sus 15 goles que sirvieron para triunfos muy importantes, sino también porque mostró una faceta que era desconocida hasta este momento: una gran ductilidad con el balón y hasta picardía para hacerse los
espacios o para saber jugar sin la pelota en los pies.

Nacido el 17 de agosto de 1980 en Bella Vista, Corrientes, el atacante había integrado los planteles de River en 1998-1999 y en 2004-2005, pero sólo en esta última etapa jugó 14 partidos en el Clausura 2004 que obtuvo el elenco "millonario", pero nunca
recibió el reconocimiento de los hinchas como uno de los goleadores más efectivos en la actualidad del fútbol argentino.

Luego de consagrarse como el máximo artillero histórico de las inferiores de River, con 138 goles, Sand pasó sin pena ni gloria por la primera del conjunto de Núñez y fue prestado a préstamo a Colón (1999-2000).

Posteriormente fue transferido a Independiente Rivadavia de Mendoza, que estaba en Primera B Nacional, para 2000-2001 y luego emigró al Vitoria de Brasil.

Para la temporada 2002-2003 llegó a Defensores de Belgrano, que estaba en la B Nacional y funcionaba como una filial de River. Su gran efectividad llevó a Leonardo Astrada a tenerlo en cuenta para 2004 en el conjunto "millonario" y el "Pepe" no
defraudó al marcar varios goles importantes.

Pero la renuncia de Astrada y la posterior llegada de Reinaldo Merlo, primero, y Daniel Passarella, después, lo obligaron a a buscarse nuevos horizontes.

Fue así que llevó sus tantos a Banfield y mal no le fue porque gritó diez goles en 33 partidos.

Sin embargo, se fue del "Taladro" debido a que Colón requirió sus servicios y regresó al club santafesino, en el que había dejado un gran recuerdo.

La llegada de Astrada llevó al club "sabalero" a retenerlo, porque Sand era uno de los preferidos del "Jefe" y el ex mediocampista central quería tenerlo sí o sí entre sus filas.

Pero para este torneo, el elenco santafesino no puso el dinero correspondiente para retenerlo y Lanús se lo llevó para suplantar los goles de Graf.

Fue así que en el "Granate" superó las expectativas que se habían generado y marcó muchos goles vitales. Tal vez los más celebrados fueron los dos en la victoria en el clásico con Banfield, que los gritó y se ganó así el cariño del público.

El "olé, olé, olé, olé, Pepe, Pepe" empezó a retumbar en cada costado del estadio de Arias y Guidi, claro que esto también le trajo algunos dolores de cabeza, porque sus ex equipos no le perdonaron que haya convertido tantos.

El caso más sorpresivo fue el de Colón, ya que el atacante correntino ejecutó el penal del 1-0 transitorio (Lanús terminaría perdiendo 2-1) y no lo gritó, pero igual recibió
insultos.

A River también le marcó una conquista y desde el Monumental llovieron reprobaciones para "Pepe", quien se defendió diciendo que era un "laburante del fútbol" y criticó a los dirigentes "millonarios" y periodistas partidarios porque nunca lo trataron bien durante su estadía en el club.

Esta tarde Sand tuvo su premio merecido, porque al reconocimiento de los simpatizantes "granates" él lo retribuyó con festejos y con un título, que no es poco.