El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, pidió hoy "eficacia y austeridad" a los miembros de su Gabinete, en el acto de jura con el que asumieron formalmente sus cargos.

"A Pro no se le va a perdonar la ineficacia y la intrascendencia, por eso, los convoco a iniciar una gestión con creatividad, convicción y mucho trabajo", afirmó Macri, tras tomarle juramento a los funcionarios de su Gabinete.

Exhortó a sus funcionarios a manejarse con "austeridad" y les exigió que tengan "mucho cuidado a la hora de manejar el dinero de los vecinos", convencido de que "una idea es genial cuando cuesta poco y beneficia a mucha gente".

"Ser puntuales y hablar poco" y "no creerse el efecto de la alfombra roja que tanto mal le ha hecho a la relación entre políticos y ciudadanos" fueron algunas de las premisas que Macri resaltó enérgicamente tras la jura de ministros.

También, Macri les pidió a sus funcionarios que "digan siempre la verdad" y resaltó que "el mayor respeto deberá ser siempre hacia la palabra empeñada".

"Somos como una hormiga que tiene que mover a un elefante; las obras que iniciemos deben terminar en fecha y con el gasto estipulado", insistió Macri, quien recomendó "dar el ejemplo" y demostrar que "el esfuerzo es valorado, para que todo el mundo se entusiasme con un espíritu emprendedor".

Además, el líder de PRO lanzó a sus funcionarios una advertencia: "No hay afecto que cubra la ineficacia y la intrascendencia", dijo después de elogiar a su equipo de trabajo, que definió como "valioso, inteligente y generoso".

Con todo, la ceremonia de jura de los ministros tuvo un ritmo distendido, que Macri marcó desde el inicio, al bromear con el nombre de cada uno de sus ministros.

"Hoy nos enteramos de todos los nombres raros que hay acá", dijo después de convocar a prestar juramento a Néstor "Osvaldo" Grindetti como ministro de Hacienda, y a Guillermo "Tristán" Montenegro, responsable de la cartera de Seguridad y Justicia.

Las ironías y los gestos habían comenzado algo antes, cuando el locutor anunció que "Marta" Gabriela Michetti firmaría el acta de inicio efectivo de su cargo. Al igual que en el acto de ayer en la Legislatura, Macri sonrió y miró fijo a Michetti, quien le devolvió un pequeño golpe en un brazo.

Macri tomó esta mañana juramento a sus nueve ministros, en medio de críticas de la oposición.

El equipo está compuesto por cuatro funcionarios extrapartidarios, un aliado de Recrear y otros cuatro surgidos del círculo de confianza del nuevo mandatario.

En una breve ceremonia que se realizó en el teatro San Martín, el principal operador de campaña del macrismo, Horacio Rodríguez Larreta, se convirtió en el jefe de Gabinete de la nueva gestión, mientras que Marcos Peña juró como su secretario general.

Esteban Bullrich, hombre que acompañará a Ricardo López Murphy en su ambición presidencial, quedó a cargo de Desarrollo Social. Durante la primera estapa de su gestión censará a los chicos que viven en la calle.

Daniel Chaín, quien asumió al frente del Ministerio de Desarrollo Urbano, tendrá a su cargo construir dos nuevas líneas de subterráneos.

Además, Juan Piccardo, juró al frente de la cartera de Ambiente y Espacio Público. El ex juez federal Guillermo Montenegro, fiscal de la controvertida causa Skanska, que salpicó al Gobierno, quedó al frente del Ministerio de Justicia y Seguridad. Seguirá insistiendo con la que fue la principal promesa de Macri a los electores: que la ciudad tenga una policía propia.

El encargado de atraer inversiones será Fracisco Cabrera, a cargo de Desarrollo Económico, aunque Néstor Grindetti, hasta hoy director del Banco Ciudad, asumió al frente de Hacienda. Tendrá que ejecutar un presupuesto de 13.083 millones de pesos.

Mariano Narodowski, el macrista que encabezó la lista de diputados de Pro se convirtió, como se sabe desde hace tiempo, en el ministro de Educación porteño, mientras que Jorge Lemus, es el nuevo ministro de Salud porteño. Hernán Lombardi quedó a cargo de Cultura.