Más de 70 personas recibieron atención médica esta navidad por heridas de pirotecnia
o por traumatismos causados por el destape de corchos en los hospitales porteños.

Las primeras cifras indicaron una disminución moderada con respecto a las de la Navidad de 2006, cuando el número final marcó que los hospitales oftalmológicos Lagleyze y Santra Lucía, y el Hospital del Quemado asistieron a más de 120 pacientes.

En el Hospital Santa Lucía habían asistido a 32 pacientes, 22 de ellos con heridas producidas por la manipulación de pirotecnia y dos por traumatismos de cráneo, con
estallido de globo ocular en dos casos.

Ese centro asistencial fue uno de los pocos que vio incrementado su caudal de emergencias, cinco de las cuales resultaron quirúrgicas, ya que el año pasado se habían registrado 17 casos.

En tanto, en el Hospital del Quemado, asistieron a 25 personas que recibieron heridas, entre los cuales sólo hubo cuatro niños, lo que evidenció un marcado avance en las campañas de prevención para evitar la manipulación de pirotecnia por parte de menores.

Tres de los niños asistidos recibieron lesiones graves: uno nena sufrió un traumatismo severo en el oído, por lo que fue derivado a la sala de otorrinolaringología y dos chicos podrían sufrir amputaciones en sus dedos.

En el otro hospital oftalmológico, el Hospial Lagleyze, sólo se habían asistido 18 personas con heridas leves.