19 de abril de 2024
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El concejal que golpeó a sus empleados por un robo
El funcionario, dueño de una farmacia, culpó a las mujeres que allí trabajan por un robo: "Las voy a matar a todas", les habría gritado. Sepa quién es
23 de enero de 2008
El robo del comercio se produjo el lunes, cerca de las 20. Tres hombres armados ingresaron al local y, después de reducir a las cinco empleadas, se alzaron con un botín de 40 mil pesos.
Pero el peor momento, según relataron las protagonistas, fue cuando llegó Peressotti. "Negritas de m… ¿Cómo se dejaron robar? Las voy a matar a todas", habría dicho el edil, según palabras del padre de una de las chicas, que se encontraba allí luego de que ella lo llamara para que la fuese a buscar.
"En un momento agarró a una de las chicas, le dio un golpe y la tiró contra un mostrador. A otra le dio una patada mientras las insultaba a los gritos. Ahí un par de padres tratamos de entrar, entonces salió y nos dijo que nos iba a matar porque tenía portación de armas. Hizo el gesto como para sacar el arma de la cintura, pero no la exhibió", contó el hombre.
Por su parte, Peressotti admitió que, ante la situación de robo, tuvo palabras "desafortunadas" hacia sus empleadas. Pero negó haberlas golpeado o amenazado, y confirmó que el martes todas ellas se encontraban trabajando, menos una que habría pedido un franco para recuperarse por el mal momento vivido, y una segunda que –según alegó- era el primer día que asistía y estaba a prueba. Justamente, el padre de ésta última sería el denunciante. "No sé qué es lo que pretende", dijo Peressotti.
Según la denuncia radicada en el Juzgado Correccional 8º, el concejal habría amenazado de muerte a sus empleadas. Además, fuentes judiciales confirmaron que ellas dejaron constancia de los insultos recibidos por el hombre, y que una habría afirmado que temía por su vida. "Te van a encontrar en un charco de sangre", le habría gritado.
Peressotti no se presentó en la comisaría de la calle Paraguay para prestar declaración.
"Los chorros fueron unos señores si lo medimos por la manera en la que actuó el dueño del lugar", relató el padre de una de las empleadas.