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29 de marzo de 2024
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¡Piedra libre para Harry!
Como se difundió la noticia en varios medios, lo retirarán de su objetivo militar, en una zona de guerra en Afganistán. "Todo el país estaría orgulloso de él", aseguró el Gobierno
29 de febrero de 2008
Las imágenes empezaron a difundirse por varios medios y el sueño del príncipe Harry en Afganistán como soldado se terminó. El Ejército y el gobierno teme que ahora se produzca un atentado por su presencia.

El 31 de diciembre dio luz verde a un ataque aéreo sobre posiciones talibanesas y "su conducta en las operaciones ha sido ejemplar", declaró el general Dannatt sobre el desempeño del joven miembro de la realeza.

Sin embargo, según señala el diario El Mundo, el Ministerio británico de Defensa decidió retirar al príncipe Harry de su misión militar, luego de que se difundiera en varios sitios de internet del mundo su presencia en zona bélica.

Este mismo militar se mostró disgustado porque la noticia se filtró antes de que Harry, de 23 años, haya concluido la misión para la cual está designado. La misma iba a durar alrededor de cuatro meses.

El último día de 2007, el príncipe viajó a la provincia de Helmand, al sur de Afganistán, para realizar control de ataques aéreos. Según consigna el diario El país, su trabajo es identificar objetivos y dar luz verde a los bombarderos para atacar a dichos puntos.

Su primera orden fue un ataque desde el aire a posiciones de talibanes. Por eso, dos bombarderos estadounidenses F-15 lanzaron tres bombas de 225 kilos sobre un búnker en el que se ocultaban 15 enemigos.

Harry se graduó en la academia militar Sandhurst y le fue denegada la posibilidad de viajar a Irak porque la Armada de su país lo consideró demasiado riesgoso.

La valentía del hijo de Carlos y Lady Di fue fue incluso resaltada por Gordon Brown, primer ministro británico: "Todo el país estaría orgullos de él si entendiera el servicio que está dando", consigna el periódico The New York Times.

Por su parte, el mismo Harry, dijo que estaba entusiasmado por su misión, manifestó que estaba disfrutando jornadas de "seminormalidad" y que permaneció cuatro días sin poder bañarse.