25 de abril de 2024
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Dos ahijados ya hacen cola para que Cristina sea su madrina
Los séptimos hijos varones nacidos en 2008 esperan que la presidenta cumpla con su obligación de ser madrina. No es una costumbre, es un decreto oficial.
26 de abril de 2008
Un niño nacido en el partido de Tigre, el pasado 19 de abril, se sumó a otro que llegó a este convulsionado mundo en febrero pasado en La Plata, y ambos esperan con ansiedad que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se convierta en su madrina.
Se trata de dos séptimos hijos varones, que según reza el decreto 848/73 del Poder Ejecutivo, deben ser apadrinados por el jefe de Estado quien a la vez tiene la obligación de subvencionarles sus estudios.
El decreto firmado por Juan Domingo Perón en noviembre de 1973 reguló una tradición, que se estableció desde el principio de siglo XX cuando el ex presidente José Figueroa Alcorta fue padrino de un séptimo hijo varón de un agricultor de origen ruso, y que le pidió al entonces mandatario, la necesidad de seguir las costumbres de la rusia zarista.
La revolución bolchevique de 1917 quebró esa tradición que Argentina se mantuvo y desde hace 34 años es una obligación del presidente de turno.
El 19 de abril pasado nació en Tigre Galo Benjamín Ciganda quien recibió el apoyo para la gestión de cumplimiento del decreto por parte del intendente del distrito, Sergio Massa, según pudo saber Asteriscos.Tv.
Sin embargo, parece que el trámite lleva su tiempo ya que aún está en lista de espera Máximo Orlando Oviedo, que nació el 9 de febrero en La Plata.
Si bien los Oviedo fueron recibidos por la jefa de Estado aún no se concretó el cumplimiento del decreto que también establece una medalla de oro y un diploma conmemorativo.
Según fuentes de la Casa de Gobierno consultadas por Asteriscos.Tv, la presidenta estaría interesada en modificar el decreto que firmó Perón, aunque no se pudo establecer cuales serían esos “cambios”.
Durante su gestión, Néstor Kirchner fue padrino de 14 niños bajo este mismo proceso, mientras el jefe de Estado que batió todos los récord fue el riojano Carlos Menem quien fue un prolífico “segundo padre” de 48 niños que recibieron sus beneficios y hasta una visita personal del ex presidente.
La actual mandataria de la Argentina, que alguna vez calificó como “El Padrino” en su acepción mafiosa al ex presidente Eduardo Duhalde durante una campaña política, debe ahora vestirse de madrina para cumplir con el protocolo.
“No encanta que Máximo, que se llama igual que su hijo, tenga una madrina en vez de padrino presidencial. Las mujeres son mas dulces y acompañan constantemente a sus ahijados y nunca se olvidan de su cumpleaños”, dijo ilusionada la madre del niño de La Plata cuando visitó Casa de Gobierno.