La educación argentina siempre en el tira y afloje. Los docentes ganan poco, los gremios lanzan paros y los chicos pagan las consecuencias.

El gobierno bonaerense debio haber buscado con más ahínco la vía de una negociación y los sindicatos de maestros deberían tener menos a mano el lanzamiento de paros amparándose en que extán eximidos de cualquier represalia.

El gremio docente de Udocba ratificó el paro de mañana en la provincia de Buenos Aires, en demanda de mejoras salariales, y cuestionó al gobierno de Daniel Scioli, por considerar que "se pretende que trabajemos gratis".

El secretario de la Unión de Docentes (Udocba), Miguel Díaz, criticó al ministro de Trabajo provincial, Oscar Cuartango, por haber declarado que los maestros no tendrían que exigir más de un 8 por ciento de aumento, el expresar que el funcionario "debería trabajar al menos un día como docente".

"Cuando dice que no hay que pedir más del 8 por ciento, le aconsejaría que trabaje al menos un día como docente" expresó Cuartango, para aseverar que el aumento del costo de vida "atacó el poder adquisitivo, sobre todo de aquellos maestros que ya descendieron debajo de la línea de pobreza".

"Hoy nos aconseja que no pidamos más del ocho por ciento, mañana nos pedirá que trabajemos gratis y en un futuro, según su criterio, tendremos que pagar para trabajar", afirmó el representante gremial, que reclama 1.800 pesos de salario básico.

Desde mañana, Udocba, gremio mayoritario de educadores públicos en la CGT, anunció la realización de un paro de actividades, con lo cual se afectará la reanudación de las clases en escuelas bonaerenses, tras el receso invernal.