San Lorenzo sufrió este domingo una apretada e injusta derrota en su debut en el torneo Apertura de fútbol, al caer contra Tigre por 1-0, en el Nuevo Gasómetro, en la fecha inaugural del certamen.

El encuentro, de opaco nivel, se definió con una conquista de Jonathan Blanco, a los 25 minutos del primer tiempo. Tigre no derrotaba a San Lorenzo en condición de visitante desde hace 53 años; y logró el segundo triunfo en la historia en esa calidad.

San Lorenzo ejerció una nítida supremacía territorial, pero su mediocampo, lento, sin vértigo, no le permitió crear acciones de riesgo en el área rival.

Tigre apeló a un esquema conservador: replegó hombres en su campo y apostó al orden defensivo y los contraataques como vía principal. El conjunto de Victoria exhibió una notable efectividad: en su única llegada en la primera etapa logró la apertura del marcador.

Fue a los 25, cuando Blanco, con un espectacular cabezazo cruzado, batió al arquero Agustín Orión luego de un centro lanzado por Leandro Lázzaro desde la derecha.

En el segundo tiempo no hubo sorpresas: San Lorenzo, obligado por el marcador, fue el único equipo que se preocupó por buscar el arco rival. Sin embargo, a pesar de las variantes que ensayó su entrenador, Miguel Angel Russo, San Lorenzo no encontró vías efectivas para quebrar a un rival que cada vez acumulaba más hombres en defensa.

El equipo de Boedo, sin embargo, tuvo una óptima oportunidad para alcanzar la igualdad con un cabezazo de Gonzalo Bergessio en tiempo adicionado que pegó en el travesaño.