En camino a su objetivo de quebrar el récord de siete oros conquistado por Mark Spitz en Múnich 72, Phelps ganó con asombrosa comodidad la final, en la que su primacía nunca estuvo en peligro, y suma ya nueve medallas de oro en Juegos Olímpicos, algo que sólo lograron la gimnasta soviética Larissa Latynina, el atleta norteamericano Carl Lewis, el atleta finlandés Paavo Nurmi y el nadador norteamericano Mark Spitz.

Con una diferencia que iba ampliando sobre Park y Vanderkaay, la "bala de Baltimore" bajó en 90 centésimas el récord del mundo de 1:43,86 que él mismo había marcado el 27 de marzo de 2007 en los mundiales de Melbourne.

Phelps, de 23 años, ganó seis oros en Atenas 2004 y lleva tres en Pekín 2008.

El norteamericano Aaron Peirsol ganó la medalla de oro de la prueba de 100 metros espalda, al fijar el décimo récord mundial de natación en los Juegos Olímpicos de Beijing.

Peirsol nadó la distancia en 52,53 segundos, por delante de su compatriota Matt Grevers (53,11) y del australiano Hayden Stoeckel y el ruso Arkadi Vyatchanin, quienes con igual tiempo compartieron el bronce.