26 de abril de 2024
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Batista y Brown: los campeones del 86 en su hora de gloria
Los hacedores del último titulo mundial de la Argentina en mayores se reencontraron con la gloria la llevar a la sub 23 a la medalla dorada en Beijing 2008. Todo llega
23 de agosto de 2008
Por Roberto Aguirre Blanco
Durante muchos años se sintieron marginados de la posibilidad de hacerse cargo de las selecciones argentinas de fútbol. Los integrantes del plantel campeón del mundo de México 1986 no eran tenidos en cuenta para estos cargos y siempre cuestionaban la marginación que sentían como hombres de experiencia mundialistas.
Con Diego Armando Maradona a la cabeza –siempre postergado por la AFA para algún cargo concreto en equipos nacionales— el resto de aquel plantel ganador de la Copa del Mundo no veía las chances de acceder a un espacio dentro de la estructura de los seleccionados.
El entrenador de esos jugadores en aquella hora de gloria, Carlos Salvador Bilardo, siempre objetó públicamente esta falta de oportunidad para un grupo de ahora orientadores táctico con mucha experiencia.
Sin embargo, en 2007, a pesar que el responsable de las juveniles Hugo Tocalli había alcanzado un nuevo título mundial (Canadá sub 20) y sumó un eslabón más al arica historia iniciada por José Pekerman en 1995, la AFA decidió no renovarle el contrato la DT campeón mundial y realizar unan reestructuración en los juveniles.
Así llegó la oportunidad de Sergio Batista como entrenador de la sub 20, junto a José Luis Brown como su ayudante de campo, junto a Héctor Enrique y Julio Olarticoechea, en los sub 17 y sub 15, todos integrantes del equipo de México 1986.
A pesar de algunas voces críticas, quienes cuestionaron a Julio Grondona esta decisión y dejar ir al exitoso Tocalli para reemplazarlo por un orientador táctico que venía de dirigir en el ascenso, batista tapó la boca de todos con este tremendo éxito deportivo.
Tras desistir Alfio Basile de dirigir la sub 23 en el torneo preolímpico y posteriormente en los juegos, el “Checho” y su equipo asumió su autonomía para afrontar este desafío que finalizó con la medalla dorada de Beijing 2008.
No solo logró una gran campaña, un título internacional deseado, sino que además logró eliminar a Brasil en un partido inolvidable, en un éxito que la selección mayor no pudo lograr en torneos importantes de la mano del “Coco”.
Con el líder natural de este grupo, Diego Maradona, en las tribunas, el ex cinco del seleccionado nacional apostó a la creatividad de el “Kun” Agüero. El olfato de gol de De María, la experiencia de Riquelme y la genialidad de la “Pulga” Mecí para dos décadas después volver a gritar ¡ campeones otra vez!.
Durante muchos años se sintieron marginados de la posibilidad de hacerse cargo de las selecciones argentinas de fútbol. Los integrantes del plantel campeón del mundo de México 1986 no eran tenidos en cuenta para estos cargos y siempre cuestionaban la marginación que sentían como hombres de experiencia mundialistas.
Con Diego Armando Maradona a la cabeza –siempre postergado por la AFA para algún cargo concreto en equipos nacionales— el resto de aquel plantel ganador de la Copa del Mundo no veía las chances de acceder a un espacio dentro de la estructura de los seleccionados.
El entrenador de esos jugadores en aquella hora de gloria, Carlos Salvador Bilardo, siempre objetó públicamente esta falta de oportunidad para un grupo de ahora orientadores táctico con mucha experiencia.
Sin embargo, en 2007, a pesar que el responsable de las juveniles Hugo Tocalli había alcanzado un nuevo título mundial (Canadá sub 20) y sumó un eslabón más al arica historia iniciada por José Pekerman en 1995, la AFA decidió no renovarle el contrato la DT campeón mundial y realizar unan reestructuración en los juveniles.
Así llegó la oportunidad de Sergio Batista como entrenador de la sub 20, junto a José Luis Brown como su ayudante de campo, junto a Héctor Enrique y Julio Olarticoechea, en los sub 17 y sub 15, todos integrantes del equipo de México 1986.
A pesar de algunas voces críticas, quienes cuestionaron a Julio Grondona esta decisión y dejar ir al exitoso Tocalli para reemplazarlo por un orientador táctico que venía de dirigir en el ascenso, batista tapó la boca de todos con este tremendo éxito deportivo.
Tras desistir Alfio Basile de dirigir la sub 23 en el torneo preolímpico y posteriormente en los juegos, el “Checho” y su equipo asumió su autonomía para afrontar este desafío que finalizó con la medalla dorada de Beijing 2008.
No solo logró una gran campaña, un título internacional deseado, sino que además logró eliminar a Brasil en un partido inolvidable, en un éxito que la selección mayor no pudo lograr en torneos importantes de la mano del “Coco”.
Con el líder natural de este grupo, Diego Maradona, en las tribunas, el ex cinco del seleccionado nacional apostó a la creatividad de el “Kun” Agüero. El olfato de gol de De María, la experiencia de Riquelme y la genialidad de la “Pulga” Mecí para dos décadas después volver a gritar ¡ campeones otra vez!.