La Argentina cerró totalmente la puerta a la posibilidad de reabrir el canje de deuda
para que entren los bonistas que se quedaron afuera con títulos por unos 25.000 millones de dólares, y aclaró que aún no inició negociaciones con el Club de París.

El jefe de Gabinete, Sergio Massa, fue el encargado de oficializar la decisión, al salir al cruce de versiones que señalaban la posibilidad de que el país hiciera una propuesta a los bonistas en esa situación, denominados "holdouts".

"Nosotros ya hicimos una oferta. No hay posibilidades que se reabra una negociación con los holdouts", afirmó, tras su discurso en el Hotel Alvear, en el marco del Consejo de las Americas, que a nivel local organiza la Cámara Argentina de Comercio.

Massa desestimó que el Gobierno haya comenzado a negociar con el Club de Paris, donde los Estados Unidos puede convertirse en un fuerte aliado para destrabar una futura negociación de una deuda en default de más de 6.500 millones de dólares.

"No tenemos ninguna oferta para realizarles a los bonistas", dijo Massa, al ser consultado luego de exponer en el encuentro del Consejo de las Américas que se realizó en un hotel céntrico.

"El Gobierno tiene una dinámica que es cuando toma una decisión la comunica; mientras tanto no juega a la especulación", añadió el jefe del Gabinete.