Por Roberto Aguirre Blanco

Una amistad de años como futbolistas lo llevó a integrar el cuerpo técnico de Carlos Bianchi desde su debut como entrenador en Vélez en 1993.

En El Fortín edificó la gloria del Virrey y participó en cinco títulos inolvidables, dos de ellos internacionales, y así lo siguió en su experiencia en Italia del �pelado� más famoso y soportó ese mal momento en la Roma.

No dudó en seguir con su amigo cuando Boca los convocó para cambiar una historia de frustraciones y a partir de allí ganó junto al Virrey otros seis títulos (Apertura 1998 y 2000, Clausura 1999; Copa Libertadores 2000/2001 y Copa Intercontinental 2000).

Cuando Bianchi dejó Boca en 2002 ya pensó en la necesidad de la independencia y de aportar sus propios conocimientos y experiencia en la actividad de entrenador titular.

A diez años de un deber por necesidad �Bianchi estaba con el equipo titular de Vélez fuera del país� el 12 de junio de 1994 debutó como DT en una derrota de El Fortín ante San Lorenzo 4 a 1, y se calzó oficialmente el buzo de orientador táctico de su querido Vélez Sarsfield.

Dirigió dos temporadas y luego en 2005 llegó a Gimnasia y Esgrima La Plata, donde estuvo, con poca suerte, sólo un torneo y medio, para luego ir a Rosario Central en el 2007.

Una buena campaña lo catapultó al banco de Boca en reemplazo de Miguel Angel Russo de la mano del fallecido presidente de los �xeneizes� Pedro Pompilio.

En el Torneo Clausura 2008 peleó el título hasta el final y terminó segundo, a la par que en la Copa Libertadores alcanzó las semifinales para convertirse en el equipo argentino que más lejos llegó.

Como una obligación para cualquier entrenador de Boca sumó un título anual, al ganar la Recopa Sudamericana al derrotar a Arsenal de Sarandí, al tiempo que fue ganador del Apertura 2008.

En las fechas finales alcanzó la punta y al empatar con Tigre y San Lorenzo fue protagonista del triangular final donde logró un nuevo título.

Ahora, el segundo �pelado� más famoso de La Ribera se suma a los ganadores de respeto en la última década �xeneize� junto a su amigo Bianchi, Alfio Basile y Miguel Angel Russo.