Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
26 de abril de 2024
Seguinos en
Eluana sigue desconectada
La mujer italiana que está en coma desde hace 17 años, ya lleva dos días sin recibir alimentación, tras el pedido de la familia y lo dispuesto por la justicia. Polémica
8 de febrero de 2009
Por segundo día consecutivo, la joven que se encuentra en estado vegetativo hace 17 años no recibe alimentación. La decisión fue adoptada en medio de los cruces entre el presidente de Italia, Giorgio Napolitano, y el jefe del gobierno, Silvio Berlusconi. Sin nombrarlo, el Papa se refirió hoy al caso y pidió una oración por los enfermos, en especial aquellos más graves que no pueden valerse por sí mismos.

Las condiciones de Eluana Englaro, la joven italiana que se encuentra en estado vegetativo desde hace 17 años, son "estables y se prosigue con la suspensión total de la nutrición artificial", procedimiento que determinará su muerte, dijo este domingo el neurólogo que la atiende, Carlo Alberto Defanti.

En tanto, la inspección efectuada este sábado por los Carabineros en la casa de reposo La Quiete (La Tranquilidad) de Udine, en el norte de Italia, donde está la joven, reveló "anomalías administrativas" sobre la modalidad de la internación, según un cable de la agencia DPA.

Por su parte, el ministro de Bienestar Social, Maurizio Sacconi, aceptó visitar a Eluana, en respuesta al llamado del padre de la joven, quien este sábado pidió el primer ministro, Silvio Berlusconi, y al presidente, Giorgio Napolitano, que vayan a ver a su hija.

"Iremos, por cierto, a visitarla, al menos yo lo considero justo, en el momento en que se haya reactivado la alimentación y la hidratación", afirmó Sacconi y estimó que la situación de regularidad de la internación se "debe recuperar".

El sábado, los médicos que atienden a Eluana Englaro decidieron suspender completamente su alimentación artificial, acelerando el protocolo médico que llevará a su muerte, mientras se multiplicaron en el país las manifestaciones a favor y en contra de la aplicación de la sentencia del Tribunal de Apelaciones de Milán sobre el caso.

La decisión fue adoptada en medio de la controversia institucional entre el presidente de la República, Giorgio Napolitano, y el jefe del gobierno, Silvio Berlusconi, que discreparon abiertamente en torno del caso.

Beppino Englaro, padre de Eluana, envió el sábado un mensaje a Berlusconi y Napolitano, invitándolos a visitar a su hija, para darse cuenta personalmente de sus condiciones.

"Soy el tutor de Eluana Englaro, pero en este momento les hablo de padre a padre", escribió Beppino Englaro, y explicó que quiere "invitar a ambos, y sólo a ustedes, para que vengan a Udine para darse cuenta, personalmente y en privado, de las condiciones efectivas de mi hija Eluana".

El gobierno de Berlusconi presentó un proyecto de ley urgente, que el lunes será examinado por el Senado, para bloquear la aplicación del protocolo al que es sometida Eluana, luego de que Napolitano no quiso firmar el mismo texto como decreto, aduciendo motivos constitucionales.

Es así que en todo el país, y de modo más o menos espontáneo, surgieron manifestaciones de protesta de los dos bandos: quienes apoyan la iniciativa del gobierno y quienes -mucho más numerosos- quieren que se proceda a la suspensión de la alimentación artificial de Eluana, en cumplimiento del fallo judicial solicitado por el padre de la mujer.

En tanto, el papa Benedicto XVI pidió hoy, sin decir el nombre de la joven Eluana Englaro, una oración "para todos los enfermos, especialmente para los más graves, que no pueden en modo alguno proveer a sí mismos, sino que son totalmente dependientes de la asistencia de otros".

El Pontífice se manifestó ante los fieles reunidos hoy en la plaza San Pedro para el Angelus dominical, reflexionando a partir de la inminente Jornada del Enfermo, publicó la agencia italiana ANSA.

El Evangelio de hoy recuerda una serie de curaciones milagrosas realizadas por Jesús, según la Iglesia, y el Papa destacó que "la experiencia de la cura de los enfermos ocupó buena parte de la misión pública de Cristo y nos invita una vez más a reflexionar sobre el sentido y sobre el valor de la enfermedad en cada situación en la que el ser humano pueda encontrarse".