El británico Jenson Button (Brawn GP) ganó este domingo su segundo Gran Premio consecutivo en Sepang (Malasia), tras interrumpirse la prueba debido a las fuertes lluvias que dejaron impracticable la pista.

Button iba en cabeza en la vuelta 33 cuando, en un Gran Premio apasionante en el que se vio a varios pilotos alcanzar la cabeza de la carrera, el coche de seguridad entró en pista. El Gran Premio se tuvo que interrumpir poco después, para definitivamente ser suspendido una hora después.

"Las condiciones eran malas. No podíamos ver el circuito. Mi equipo me pidió que intentará quedarme en la pista y eso ya era difícil. A veces decimos que se forman ríos en los circuitos, pero aquello era un lago", estimó Button en la conferencia de prensa.

"Estoy contento de la carrera no continuara. Hubiéramos pasado diez vueltas tras el coche de seguridad con el temor a salirnos de la pista en cada curva", afirmó el británico.

Timo Glock (Toyota), segundo en la 33ª vuelta, pasó al tercer lugar, su posición en la 31ª, tras una carrera muy desigual, en la que perdió cinco puestos rápidamente para posteriormente volver a remotarlos gracias a una buena elección de neumáticos.

recisamente los neumáticos fueron fundamentales en Sepang. Los pilotos que eligieran las gomas que se adaptaran mejor a las circunstancias cambiantes del Gran Premio o que las cambiaran en el mejor momento, a veces por suerte, terminaron en los puestos de cabeza mientras el resto quedaron en segundo plano.

Uno de los que no tuvo suerte en este aspecto fue Fernando Alonso (Renault) que acabó undécimo. Renault tocó fondo, ya que no consiguió ni un punto.

"He hecho una excelente salida, pasando de la novena plaza a las tercera en la primera curva. Luego he tenido que defender mi posición porque iba muy lento. Esa parte de la carrera fue interesante", explicó Alonso.

La otra cara de la moneda la protagonizó Nick Heidfeld, segundo tras haber salido en décima posición en la parrilla, gracias a la estrategia ganadora de BMW Sauber.

Mientras que algunos de los corredores pasaban hasta cuatro veces por boxes, Heidfeld solamente paró una vez.

En la vuelta 22, "a 300 metros de boxes comenzó a llover fuerte. Me calcé los neumáticos de extra lluvia, así que todos los pilotos me pasaban, pero yo sabía que iban a tener que cambiarlos", explicó el piloto de BMW.

Tal y como sucedió en Melbourne, donde no se llevó ningún punto, Ferrari fue la gran perdedora del fin de semana. La Scuderia ya pecó de "presunción" en las calificaciones según su patrón y su estrategia no funcionó, lo que dejó a Felipe Massa en la 16ª plaza de la parrilla de largada.

Este domingo se equivocaron al colocar los neumáticos extra lluvia en el monoplaza de Kimi Raikkonen, lo que le hizo perder rápidamente posiciones hasta terminar 14º.

McLaren-Mercedes confirmó el poco potencial de su monoplaza y Lewis Hamilton terminó séptimo.