El "Padre Pepe", como se lo conoce en la zona, había presentado un resonante documento que denunciaba que las drogas, en especial el paco, estaban "despenalizadas" en las villas en las que trabajan en el sur de la Capital.

A raíz de esa revelación, el prelado hizo la denuncia a la Policía y esta tarde, en rueda de prensa, aclaró que "no fue una simple amenaza. Fue una amenaza de muerte".

El sacerdote contó que un desconocido se le acercó el lunes por la noche cuando se dirigía una reunión con otros curas en su bicicleta y ése sujeto dijo dos veces "Vas a ser boleta". El violento mensaje, según recordó, fue: "Rajá de acá que vas a ser boleta una vez que esto deje de ser tema en la televisión. Ya te la tienen jurada", informó el portal INFOBAE.COM.

El suceso ocurrió sobre las 20:30 en la villa de Parque Patricios, donde el padre Pepe trabaja para ayudar a jóvenes adictos a las drogas. "El punto estaba ahí, en la denuncia. Me dio la impresión que me estaba hablando de la denuncia sobre las drogas en las villas", afirmó el cura. Y matizó que "me queda claro que esta persona no es de la villa. No lo conocía". Con esto, el sacerdote apuntó a los narcotraficantes.

"No era un tipo que parecía estar enojado. Fue una amenaza o un aviso", enfatizó el padre Pepe. Por eso, relató que "cuando quise seguir charlando, el tipo se fue".

A pesar de la amenaza, el cura aseguró que "no me voy a ir de la villa" y que "tiene que tomar las precauciones y seguir la vida normal y corriente. Esta no fue la primera amenaza. Hubo otras en otros tiempos por diversos motivos".

Finalmente, Di Paola agradeció la "gran solidaridad" por parte las autoridades del gobierno nacional, la Provincia y la Ciudad.