El gobierno de Senegal informó que localizó en su territorio marítimo trozos de una avión que podría pertenecer al Airbus desaparecido esta mañana con 228 pasajeros.

Asimismo, señalaron que aún no han podido confirmar que el material descubierto sea el mismo que el de la aeronave que partió de Río con destino a París, cuyo rastro fue perdido por los radares.

Por otra parte, el vicepresidente brasileño, Jose Alencar, manifestó que el piloto de un avión de la empresa TAM se encontraba sobrevolando el océano Atlántico, observó "algo prendiéndose fuego", según informó el diario O Globo.

La información fue confirmada por la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), que indicó que un avión que realizaba la ruta contraria al Airbus -de Europa hacia Brasil- avistó "puntos naranjas" en el océano. De todas formas, la empresa TAM, por su parte, declinó comentar al respecto de los dichos del vicepresidente brasileño y la FAB.

La información que se maneja es que el avión de Air France se habría estrellado en el océano Atlántico cuando atravesaba por una tormenta durante su vuelo de Río de Janeiro a París, muriendo posiblemente sus 228 ocupantes.

La aeronave llevaba a bordo 216 pasajeros -126 hombres, 82 mujeres, siete niños y un bebé- y 12 miembros de la tripulación.

Un Airbus 330 nunca se había perdido durante un vuelo comercial y es extremadamente inusual que una nave sea derribada por tormentas.

La nave ingresó a un área de tormentas unas cuatro horas tras su decolaje de Río de Janeiro y 15 minutos después envió un mensaje automático indicando fallas eléctricas, dijo Air France. Sin embargo, no hubo señal de que tripulación enviara mensajes de auxilio y los localizadores que emiten señales de emergencia tampoco se activaron, como debe ocurrir en casos de un impacto.

La compañía señaló que un rayo podría ser el responsable y que varios de los mecanismos del Airbus podrían haber fallado. "Es demasiado pronto para decir lo que pasó y lo que causó esta tragedia", dijo Isabelle Birem, directora general de Air France en Brasil, en una conferencia de prensa en Sao Paulo.

El Airbus 330 podría haber sufrido una falla eléctrica que haya afectado a los instrumentos de navegación, lo que hubiera dejado efectivamente "ciegos" a los pilotos y a la aeronave justo en medio de un notorio mal tiempo, agregaron.

Como consecuencia de la desaparición, Brasil y Francia enviaron aviones y barcos de sus fuerzas armadas para rastrillar la remota zona del Atlántico donde habría caído el moderno Airbus 330-200, pero la aerolínea y funcionarios dijeron que había escasas posibilidades de sobrevivientes.

Si no se encuentran sobrevivientes, ésta sería la peor pérdida de vidas humanas por un accidente de un avión de Air France en sus 75 años de historia.