Casi 2000 reclusos alojados en tres cárceles bonaerenses, continúan con una huelga de hambre en reclamo de agilizar la morosidad judicial y por la aplicación de beneficios alternativos a la prisión (como el arresto domiciliario, salidas transitorias o arrestos con pulsera).

Los huelguistas son de la Unidad 24 de Varela; Unidad 9 de La Plata (más de 1200) y la Unidad 1 Olmos. El grupo de presos de Olmos se sumó ayer a la medida que desde el viernes último mantienen los internos del penal 9 de La Plata en demanda de la agilización de sus causas, entre otros pedidos.

Además, otros catorce detenidos en la comisaría de la localidad platense de Melchor Romero, también se plegaron al pedido y a la huelga de hambre en adhesión a los reclamos. Los presos se niegan a recibir alimentos a la espera de respuestas a su petitorio entregado días atrás, donde reclaman una serie de medidas tendientes a agilizar la tramitación de sus causas judiciales.

En el escrito solicitan la derogación de la ley de excarcelaciones 12.405, la creación de una ley procesal de excarcelación acorde a las pautas establecidas por los organismos de derechos humanos, la conformación de una figura procesal que sancione a jueces que incumplan sus funciones y que se fije un plazo razonable de prisión preventiva, entre otras cuestiones.

Según un comunicado del Comité contra la Tortura de la Comisión provincial por la Memoria al que accedió Télam, los reclusos exigen, entre otras cosas, que se equipare la pena de reclusión a prisión, que se fije el cese de la prisión preventiva si transcurridos 24 meses no hay fallo firme, y que se derogue por completo la ley 12.045 (que endureció el sistema de excarcelaciones).

"Los detenidos manifiestan encontrarse en un estado de absoluta indefensión legal, la mayoría no conoce a sus defensores y no tienen una adecuada defensa en sus causas. No conocen a los jueces. El tribunal de Casación tarda años en resolver las causas, hay tribunales que están fijando fechas de juicio oral para el año 2013, el juicio abreviado se convierte en una extorsión", precisa el Comité contra la Tortura.