Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
24 de abril de 2024
Seguinos en
Todos queríamos vivir a pleno la "jacksonmanía"
"Thriller", de 1983, cambió el pop y en Argentina fue furor. Todos querían bailar como el astro. En la TV tuvo su propio programa y Domingo Di Nubila fue su estrella
25 de junio de 2009
Por Roberto Aguirre Blanco

Todos queríamos ser Michael Jackson, o al menos bailar y divertirnos como él, como parecía que lo hacía el cantante mientras recorría la escenografía ficticia de una calle que se iluminaba con sus pasos rítmicos en "Billie Jean".

Para los argentinos, era el verano maravilloso de 1984, atrás habían quedado los oscuros años del proceso, a los que muchos joveness le pusieron creatividad para hacerlos más llevaderos.

"Thriller", el disco que consagró a Jackson en el mundo, y que es aún hoy récord de ventas (figura en el libro Guinnes) con 27 millones de placas solo en Estados Unidos, había salido un año antes en ese país, más precisamente el 1 de diciembre de 1982.

En el invierno norteamericano de 1983 comenzó a moverse en las listas de ventas aunque no fue un furor hasta casi fin de ese año cuando salió editado el tercer corte de la placa, justamente "Thriller", tema que acompañado de un video clip revolucionario hizo explotar las ventas del LP.

En la Argentina, la llegada de la Democracia también abrió la puerta para una música más cercana a "La dicha en movimiento", y con las ganas de divertirnos entre diciembre de 1983 y febrero 1984, las radios se llenaron de sonidos pop, latinos y divertidos.

Así se dejaban escuchar los "Los Twist" con "Cleopatra, la reina del Nilo" y Pensé que se trataba de cieguitos", "Virus", con su "Pronta Entrega", Los Abuelos de la Nada con "Himno de mi corazón" -en realidad un tema de Miguel Abuelo-- además de "Chala Man y Mil horas".

Hasta ese momento, las nacientes FM --quien no se acuerda de "9 PM", el mítico programa de los sábados a la noche en Del Plata con Lalo Mir y la "negra" Vernacci-- no dejaban escuchar mucho de este segundo disco en la carrera solista de Michael, y que tuvo el sello en la producción de Quincy Jones.

El productor que había ya grabado con Frank Sinatra, rodeó a Jackson de un sonido muy particular y bajo su influencia y la del compositor Rod Temperton (el autor de Thriller) le dio a los temas de Michael un sonido excpecional con sus mixturas de pop, tecnco, rock, disco y mucho funky.

A pesar de la buena factura de los dos primeros cortes, "Billie Jean" y "Beat It", fue "Thriller" con su video de 13 minutos y medio el que hizo subir como tsunami las ventas del disco.

En enero de 1984, un año después de su lanzamiento, Jackson junto al director cinematográfico John Landis diseñaron el guión y la realización del clip musical de "Thriller", que contenía además una historia de terror y homenaje al cine de ese género.

Así se vio al entonces moreno cantante transformarse en hombre lobo dentro de una película que el mismo Jackson miraba con su novia, y luego convertirse en uno más de los muerttos vivientes que aparecían cuando el muchacho y la chica en cuestión caminaban por un cementerio.

La longitud del video clip original, más de cinco minutos y el mediometraje filmado para lanzar el tema, hicieron que las ventas de disco y video rompieran todos los record.

Si entonces hubieran existido los ringstone, los colectivos y calles se hubieran llenado de sonidos Jackson con toda seguridad.

El video clip completó su homenaje con la risa y la voz en el final del actor Vicent Price y la niña, una bella morena, que acompañó a Michael en este clip, Ola Min, llegó a la tapa de la revista Playboy.

A partir de allí todo lo que tocó el joven Rey Midas fue oro en polvo, ganó varios Grammy por este disco, siguió vendiendo y grabando, y vivió durante esos glamorosos años 80 lo mejor de su carrera profesional.

A la vez, fue mutando su imagen con decenas de operaciones y tratamientos que lo alejaron de su piel negra para convertirse en una pintura de difícil calificación, al tiempo que se sumergía, ya en los 90, en sus propios laberintos de problemas personales.

Por aquellos años, hace ya 25, queríamos despertar y vivir de otra manera: alimentamos nuevos sueños y la música fue un sostén muy importante. En ese escenario "Thriller" se nos grabó a fuego como también lo hizo ese disco bisagra de Charly García: "Clics Modernos".

La Argentina fue también una "Jacksonmanía", y para comprobarlo sólo hay que recordar el programa de Domingo Di Nubila en canal 9, donde los chicos competían para bailar "breakdance" al mejor estilo Michael.

El estudio de la emisora siempre se llenó de imitadores del cantante.

Ahora todos dicen: "Nunca estuvimos allí".