El Gobierno salió a cuestionar el pedido de una amnistía general realizado ayer en Plaza San Martín por parte de agrupaciones que recordaron a los muertos por la guerrilla durante la última dictadura militar.

El ministro del Interior, Aníbal Fernández, afirmó hoy que "no hay amnistía que valga" para dejar clara la postura del Gobierno.

"Aquel que tenga responsabilidad tiene que pagar por ello; no hay anmistía que valga", reflexionó el ministro al ingresar el Teatro Colón de Mar del Plata para inaugurar una jornada de debate.

Por su parte, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, aclaró que "el genocidio no prescribe ni es amnistiable", mientras convocaba a la marcha de esta tarde por la aparición del testigo Jorge Julio López.

"Está bien que se expresen, pero no se puede permitir que reivindiquen el terrorismo de Estado", agregó Carlotto.

La ministra de Defensa, Nilda Garré, también se refirió al acto de familiares de víctimas de la subversión y manifestó desde Ushuaia que "son presiones que ya se intentaron para trabar la acción de la Justicia y de ningún modo van a prosperar".