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20 de abril de 2024
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La campaña de Cristina Kirchner hasta en la SIDE
Oyarbide reveló que se grabó una charla entre un ex funcionario y un acreedor de Lorenzo por el financiamiento de la campaña que la llevó a la presidencia
8 de septiembre de 2009
El juez Norberto Oyarbide dio otras pistas sobre la "caja de Pandora" que constituyen las escuchas telefónicas del empresario Néstor Lorenzo que interfirió la SIDE. Dijo que "también en las escuchas telefónicas resultan diálogos sabrosos y atinentes a la campaña (electoral de Cristina Kirchner del 2007), entre un empresario llamado Gabriel Brito y (Héctor) Capaccioli".

Este último, fue titular de la superintendencia del servicio de salud y recaudador de la campaña financiera de la actual presidenta. Se fue de la "super" peleado con la entonces ministra de Salud, Graciela Ocaña, en el 2008. Capaccioli tenía anoche el celular apagado. Y Brito es el titular de la empresa Global Farmacy Ser que en la rendición de gastos de el Frente para la Victoria entregó a la Justicia figura como donando $ 310.000. El problema es que Global Farmacy tenía un pedido de quiebra de Lorenzo y Brito había negado al fiscal electoral Jorge Di Lelo haber hecho esa donación, informó el diario Clarín.

Además, tal como adelantó una investigación de Clarín el año pasado, Oyarbide había secuestrado de una oficina de Lorenzo los recibos del Frente para la Victoria de los recibos de los cheques entregados por Carlos Torres, Julio César Pose y Global Farmacy por casi un millón de pesos. A esto se suman, la donación de 200 mil pesos que figura a nombre de Sebastián Forza, vinculado comercialmente a Lorenzo, y una de las víctimas del Triple Crimen de General Rodríguez.

¿Qué hacían esos recibos originales en manos de Lorenzo? Se sospecha que el empresario sería el verdadero donante de la plata que otros pusieron a su nombre. Se trata de donaciones hechas para tener luego, si gana el candidato, una retribución. Lo cierto es que Capaccioli, antes de renunciar, decía que la plata de Forza provenía, en realidad, de un poderoso sindicalista K, seguramente de uno de los que hicieron negocios con Lorenzo.