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26 de abril de 2024
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Nueva ley, menos programas
Con la nueva ley de medios, el 60 por ciento de la programación de los canales de televisión por cable deberá ser de producción nacional
9 de octubre de 2009
Con la nueva ley de medios, el 60% de la programación de los canales de televisión por cable deberá ser de producción nacional.

Eso implicará que, de los 65 canales que conforman cualquier grilla de los cableoperadores, al menos 40 deberán ser de producción local.

Desarrollar una señal de cable no es fácil ni barato.

Los grupos que tienen varios canales de cable, como Time Warner, Pramer, Sony, Fox y otros son multinacionales con fuerte respaldo financiero.

Y sus producciones de ficción sólo recuperan sus costos porque tienen distribución en todo el mundo. "Cada capítulo de ficción en EE.UU cuesta US$ 1 millón.

"Cada programa de un unitario local no baja de los US$ 200.000. Se necesita venderlo en la Argentina y en varios países limítrofes y España para recuperar la inversión", explican varios productores de televisión. Por eso, se produce cada vez menos ficción local.

Si la financiación de los mismos era complicada antes de la restricciones, ahora, con menos ventanas de distribución, será aún más difícil.

La producción de avisos que se tienen que emitir en televisión también debería ser mayoritariamente nacional. Allí hay varios contrasentidos.

Por un lado, las grandes multinacionales trabajan cada vez más con "pattern": un esquema global al que sólo le adaptan las traducciones de idiomas.

Con la nueva ley, las tandas de los canales lucirían más vacías que lo actual, como ya lo señaló la Cámara Argentina de Anunciantes.

Sin avisos, ningún medio de comunicación privado es sustentable. Adicionalmente, si los demás países impusieran el mismo "proteccionismo" visual que la Argentina, la numerosa cantidad de productoras de cine publicitario locales que proliferaron en el último lustro perderían el 80% de sus ingresos.

El país se volvió competitivo para avisos que se ven en México, Estados Unidos, Europa o Asia.

Pero si esos territorios exigieran que las piezas que emitan sus medios fueran hechas dentro de sus propias fronteras, las piezas hechas en la Argentina no tendrían donde exhibirse.