La jueza federal María Servini de Cubría consideró hoy que la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, se retractó y cerró la querella por injurias que le promovió el ex presidente Eduardo Duhalde.

Servini de Cubría consideró que en el juicio Carrió "pidió perdón" a Duhalde y sostuvo que "nunca" le imputó un delito criminal al ex presidente sino que le adjudicó "responsabilidad política" en el asunto.

La jueza dio por hecho que con sus afirmaciones Carrió se retractó de sus dichos originales, así que dictó una conciliación.

Ayer, ambos dirigentes protagonizaron picantes cruces en el despacho de Servini de Cubría. Duhalde estuvo acompañado por sus abogados y su esposa, la senadora nacional Hilda González. A Carrió la acompañaron sus letrados y la diputada Patricia Bullrich.

La querella de Duhalde ("tercera de mi vida", dijo) surgió por declaraciones que la jefa de la CC realizó el 11 de julio de 2005, durante la campaña electoral de renovación legislativa, en el programa 'Desde el llano', que conduce Joaquín Morales Solá por el canal TN.

Allí Carrió se refirió a la unión política de los Kirchner con el ex presidente en 2003: "Yo nunca hubiera hecho una alianza con Duhalde porque siempre dije que controlaba la droga en la provincia de Buenos Aires" y reiteró que "jamás hubiera hecho una alianza con el poder mafioso".

En la declaración indagatoria, la jueza Servini de Cubría le preguntó si recordaba aquellos dichos y Carrió contestó: "Lo ratifico absolutamente porque estoy convencida (de que Duhalde) controlaba la droga en la provincia de Buenos Aires".

Aunque enseguida advirtió: "Yo no culpo al señor Duhalde de ser narcotraficante ni le imputo ningún delito criminal, porque si hubiera tenido las pruebas lo hubiera denunciado en los tribunales. Nunca lo culpé de ser narcotraficante".