Como el "Fútbol para todos", la estatización de las jubilaciones puede terminar en una catástrofe financiera de proporciones si el gobierno sigue echando mano de los recursos de la ANSeS como si fuesen un barril sin fondo destinado a financiera el déficit de las cuentas públicas.

El superávit del presupuesto tomó el camino de una curva descendente desde enero, mientras que en octubre el país cumplió cinco meses consecutivos con déficit financiero. Por otra parte, el camino hacia financiamiento internacional barato todavía es inaccesible.

Para detener la erosión del ancla fiscal (el superávit primario), en lo que va de 2009 el Gobierno ya pidió a organismos públicos recursos por más de $54.300 millones, revela la revista Fortuna.

La cifra surge de sumar todas las resoluciones en este sentido publicadas en el Boletín Oficial a lo largo del año. De este modo, el uso recurrente de letras de deuda y otras opciones se convirtió en uno de los instrumentos favoritos de la secretaría de finanzas.

El total de la deuda intra-estatal nacional alcanza un total de $54.362.556.681. Del total, el 40% proviene de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES), PAMI y el Fondo de Garantía de Sustentabilidad.

El 18 de agosto pasado el Gobierno obligó a la ANSeS a comprar U$S 100 millones en deuda pública, mientras que el 30 de septiembre le requirió suscribir dos Letras del Tesoro por $1.900 millones.

Asimismo, la suma de todas las suscripciones internas de deuda dan cuenta de pasivos por $40.900.756.681 en pesos y otros U$S 3.524 millones (considerados a un tipo de cambio de $3,82).

Según publicó el viernes 27 el Boletín Oficial, el ministerio de Economía suscribió una Letra del Tesoro de $143.720.000 para el Instituto Nacional de Reaseguros (INDER), un organismo que casualmente está en proceso de liquidación.

La medida fue ordenada por la resolución conjunta 308/2009 y 93/2009 de la secretaría de Hacienda y la de Finanzas respectivamente.

Esta misma semana la Presidencia firmó dos decretos que amplían las bases de financiamiento:

Transferencia al Tesoro Nacional de recursos correspondientes a Aportes del Tesoro Nacional (ATN) por hasta $9.000 millones (decreto 1837/09).

Ampliación de gasto en $24.278 millones en el Presupuesto Nacional (decreto 1801/09).

De esta última ampliación de gastos, la Presidenta destinó $4.700 millones adicionales para pagar remuneraciones, $2.730 millones para jubilaciones, $1.830 millones para subsidios al transporte y $1.130 millones para subsidios a la energía, entre los más destacados.

En tanto a los ingresos, se amplió en $20.820 millones los recursos de capital y corrientes.

La película se sigue desarrollando, y parece ser de terror.