Daniel Passarella ganó, or 6 votos, las elecciones en river. Pero, su rival más cercano, Rodolfo D'Onofrio, dijo que irá a la Justicia para apelar el resultado de las elecciones.

Las aguas están calinetes en el gallinero y no es para menos. La noche del sábado, D' Onofrio le confirmó a Clarín que este lunes irá a la Justicia para reclamar fraude electoral, pedir un recurso de amparo e impedir que El Kaiser asuma esta semana como nuevo titular de River.

La historia que se vivió hasta las primeras horas del domingo fue entre bochornosa y desopilante. En la que D' Onofrio y sus seguidores se dieron por ganadores con fuegos de artificios y discursos proclamadores; y en la que Passarella fue por el mismo lado y al mismo tiempo. Lo seguro es que los números de la elección dejaron descolocados a más de uno. Incluso al también candidato a presidente Antonio Caselli, quien apuntaba a ganar, pero terminó tercero, aunque con un caudal histórico de 2.765 votos, hecho que ningún tercero en una elección en River logró jamás.

Hugo Santilli, candidato a vicepresidente primero en la lista de D'Onofrio, fue claro con Clarín: "Acá hubo fraude electoral y recurriremos a la Justicia. Pedimos recuento de votos y no quisieron, y metieron votos que deben ser impugnados como válidos". Passarella había declarado, por otro lado, el domingo a las 3 de la mañana: "Hubo algo raro en la elección porque nosotros estábamos cinco puntos arriba en boca de urna y no es posible que todos los encuestadores se hayan equivocado. Gané porque la gente quiere un cambio. Catorce mil personas se manifestaron en las urnas y se dieron cuenta de que el cambio éramos nosotros porque D'Onofrio y Santilli eran más de lo mismo, con Aguilar e Israel detrás".

Diego Turnes, vicepresidente primero de Passarella, le contestó a Santilli: "De ninguna manera hubo fraude; en todo caso fue de ellos que metieron boletas truchas para que nos anularan votos". Este tipo de acusaciones cruzadas, que fueron una constante durante la previa de la elección, apuntando a quién era oficialista y quién no, todavía siguen por estas horas.

La confusión mayor se dio al oficializarse un triunfo del candidato D'Onofrio en una pantalla cuando en realidad no era tal, ya que, según aseguraron desde la comisión electoral, y desde el búnker de Passarella, en ese recuento fue la lista del Kaiser la que ganó por un voto y no la de D'Onofrio por dos. Y después, cuando se revisaron los votos impugnados por el tamaño de las listas y porque en unas decían Frassarella, y no Passarella, esa diferencia creció de uno a seis votos.

¿En qué se sostiene el reclamo de D'Onofrio? En que no se hizo recuento de votos y en que ellos son los ganadores por dos votos, según su primer cierre. Por eso la historia sigue. El actual presidente, José María Aguilar, se iba a ir a Emiratos Arabes a un congreso de la FIFA, pero se queda. Porque teme que si prospera el recurso de no innovar que se solicitará hoy, Passarella no pueda asumir, y ahí él debería continuar en su cargo. Es más, ante la inminencia de la feria judicial, si el fallo no es inmediato, Aguilar debería estar hasta febrero al menos. Y de ser así, ¿quién elegiría los refuerzos, el lugar de pretemporada y demás? Lo que se dice un verdadero caos. Caos que ya se hizo mala costumbre en River.