El banco de inversiones JP Morgan recomendó al mercado la compra de bonos argentinos, tras el anuncio formulado durante la víspera por la presidenta Cristina Kirchner, que tomó U$S 6.500 millones de las reservas para el pago de deuda.

Un informe elaborado por el economista de JP Morgan en Nueva York, Vladimir Werning, sostiene que a los precios actuales la ponderación de los bonos argentinos se ubicaron "sobre el promedio del mercado".

Por eso, dice el informe, "recomendamos" la compra de bonos argentinos, en especial de los Boden 2015.

Los mercados terminaron con alzas, el día después de que se desatara una nueva crisis institucional a raíz del anuncio de la Presidenta en el discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, donde precisó -en otras palabras- que el Gobierno tomará 6500 millones de dólares de las reservas, aunque derogó el DNU que creaba el Fondo del Bicentenario.

El principal índice de la bolsa porteña, el Merval, cerró la sesión en alza, con un avance del 0,90%.

Los bonos de deuda soberana también terminaron en positivo, aunque no con las ganancias del 4% que llegaron a mostrar a poco de la apertura. El Discount en pesos subió 1,10% y el Par en la misma moneda acompañó con una mejora del 1,51%.

El Boden 2015 reunió el grueso de los negocios ($ 23 millones) y en materia de precios creció 0,32%, acumulando en dos días un repunte del 1,99%.

En esa tónica, y siempre entre las emisiones más líquidas, el Bogar 2018 avanzó 0,27% y por el lado del Boden 2014 los inversores se llevaron una ganancia del 0,88%.

En las principales casas de cambio y entidades de la City porteña, el dólar se movió con calma y se ubicó en $ 3,88 para la venta minorista.

El Banco Central detuvo la escalada de la moneda estadounidense la semana pasada, luego de que la anterior se moviera un centavo al alza, una mecánica que venía repitiendo a tono con la "devaluación administrada" que aplica la autoridad monetaria.

También el dólar mayorista mantuvo su precio, por la ausencia de grandes negocios con dólares y la postura intervencionista del Banco Central.

Operadores cambiarios dijeron que el mercado permanecía cauteloso a raíz de nuevas tensiones en el plano político, ya que la decisión del Gobierno de pagar deuda pública con reservas puso en alerta a la oposición. La moneda local en la franja mayorista continuaba a 3,8575 por dólar.

En su plan de dar certezas sobre el pago de los vencimientos de 2010, Cristina Kirchner dio una señal al mercado: pagará con reservas, pese a que su plan, que prevía la creación del Fondo del Bicentenario, resultó derogado.

Así, logró imponerse sobre las trabas que surgieron -por el avasallamiento a la institucionalidad del Banco Central denunciado por la oposición- a su intención de utilizar esos fondos.