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Ataque a Tabaré
Kirchner calificó de "intransigente" al presidente del Uruguay por el tema papeleras. Dijo que "ganaron los intereses internacionales" y que no reprimirá los cortes de ruta
22 de noviembre de 2006
El presidente Kirchner perdió los estribos.

En duros téminos y visiblemente ofuscado, Kirchner defendió hoy las gestiones del Gobierno para frenar los créditos otorgados por el Banco Mundial a Botnia, crítico a la prensa por haberlos evaluado como "una derrota para el país" y atacó a Tabaré Vézquez, al calificarlo de "intransigente".

Además, también en medio de una embestida contra los medios, ratificó que no reprimirá los cortes de ruta, aunque volvió a pedirle a los vecinos que los levanten.

Como hace con frecuencia, el jefe del Estado aprovechó un acto en la Casa Rosada para referirse a temas conflictivos de la coyuntura.

“Me gustaría compartir con ustedes algunos temas de actualidad. Hoy veía con asombro algunos titulares de importantes matutinos donde se dice que la Argentina ha tenido una nueva derrota respecto de la decisión del Banco Mundial de otorgar el crédito a Botnia”, comenzó el Presidente, que hasta ese momento se había ceñido a hablar de las obras que estaba anunciando para la provincia de Mendoza.

Enseguida, llegó la defensa de las gestiones desplegadas por el Gobierno para intentar congelar el financiamiento para Botnia, la empresa que construye la papelera en Fray Bentos y que el Banco Mundial aprobó ayer.

“Fuimos a defender convicciones. Esto no es un partido de fútbol. Cuando está en juego la defensa de intereses nacionales, no se gana ni se pierde”.

Y añadió: “Cuando vamos a dar batallas, como es el caso de la defensa del medio ambiente, no vamos pensando en los intereses internacionales que ya decidieron que esta región tiene que ser el basurero industrial del mundo".

En este contexto, el jefe del Estado sugirió que el enfoque de los diarios sobre los préstamos para la firma finlandesa debió haber sido otro. “Volvieron a ganar los intereses de Botnia, ese el titulo, téngalo claro”, disparó.

Enojado, insistió: “Acá no ganó la posición de un país, ganaron los intereses de Botnia y esto no se dice en ningún lado”.

Entonces, llegó la embestida contra el presidente uruguayo, una de las más duras desde que se inició el conflicto bilateral por las papeleras. Kirchner se refirió a Vázquez como "el instransigente presidente uruguayo" y lo diferenció del gobierno argentino, que, aseguró "busca todos los caminos posibles para que se respete el tratado del Río Uruguay".

Tras recibir aplausos por asegurar “seguirá peleando” contra los intereses de Botnia “por más fuertes que sean”, el Presidente apuntó sus críticas directamente al periodista de LA NACION Joaquín Morales Solá, que en una columna publicada hoy criticó la decisión oficial de enviar una carta al titular del Banco Mundial, Paul Wolfowitz, para pedirle que suspendiera el financiamiento para Botnia.

“Quiero dirigirme a Joaquín Morales Solá, a quien respeto, y que hoy se pregunta quién escribió la carta”, arrancó el Presidente, en referencia al texto enviado al jefe del BM.

“Le digo con todo respeto que el que se tiene que ir del Gobierno soy yo, porque el que escribió la carta fui yo. Si quiere que me vaya me voy porque la escribí yo, nadie lo hizo por mí, como a usted no le escriben los artículos”, lanzó.

En rigor, en su columna, Morales Solá escribió: “¿Quién le aconsejó al Presidente que debía firmar una dura carta al Banco Mundial contra el crédito a la empresa Botnia? Sea quien fuere -y ciertamente no se sabe quién fue-, debería estar hoy fuera del Gobierno. No se puede someter a un presidente a semejante desaire, como tampoco se puede seguir colocando al país en el centro de estrategias perdidosas".

También en medio de críticas a la prensa, Kirchner aprovechó la última parte de su discurso para volver a pedirles a los vecinos de Entre Ríos que levanten los cortes y a ratificar que no piensa reprimirlos.

“Si hay alguno que piensa que hay que ir a reprimir a los hermanos de Gualeguaychú, que lo escriba y que lo diga. Yo no lo voy a hacer, no voy a levantar la mano contra otro argentino”, reafirmó.

“No estoy de acuerdo con los cortes pero tenemos que evitar la hipocresía y que nos hagan caer en la provocación”, insistió el Presidente.

En este contexto, renovó el pedido a los vecinos de Entre Ríos, que el domingo pasado volvieron a los bloqueos por tiempo indeterminado y que amenazan con mantenerlos durante el verano. “Les pido de todo corazón que levanten los cortes”, les dijo.