El primer hombre que bajó a buscar a los mineros, Manuel González, fue el último rescatista en salir de la mina, tras rescatar durante un día a los 33 trabajadores que quedaron atrapados hace 70 días en la montaña de Copiapó.

Luego de 24 horas y medio terminó la "Operación San Lorenzo", con nadie dentro de la mina, que quedó iluminada y con una cámara en su interior, y que la mostró vacía tras el milagro que fue seguido por todo el mundo. Ni Hollywood podría haberlo hecho mejor.

El presidente Piñera, que estuvo al pie de la salida de la mina todo el día sin dormir junto a sus esposa, abrazó a Manolo González y agradeció la entrega de cada uno de los rescatistas y trabajadores que hicieron posible la hazaña.

"Tarea cumplida, hemos sacado a todos. Lo logramos", dijo emocionado Piñera mientras los trabajadores y asistentes rompían sus gargantas al grito clásico de "Chi, chi, Chile, rescatistas de Chile".

Como último acto, el presidente y los hombres del salvataje taparon el agujero de la mina con una lamina de acero que tenía una inscripción en memoria de los que sufrieron la odisea de estar bajo tierra dos meses.