La periodista Paula Chahin, la mujer del ex guerrillero chileno Galvarino Apablaza Guerra, trabaja en la Secretaría de Medios de la Nación, que tiene sede en la Casa Rosada.

Según dijo a la revista Noticias, ser a la vez la esposa del hombre cuya extradición a Chile viene negando el Gobierno argentino y también funcionaria cercana a la Presidenta, no es motivo suficiente para que se le dedique una nota periodística.

Sin embargo, los medios chilenos -con el diario El Mercurio a la cabeza- subrayan sus contactos con la Presidencia como un dato fundamental para que a Apablaza le concedieran el refugio político.

Pero ella está convencida de que se trata de una "persecución política".

Primero como periodista y luego como funcionaria de la Presidencia de Argentina, Chahin, cultivó una amplia red de contactos políticos en el kirchnerismo. Estuvo en Chile hace un mes y expresó estar convencida de que no habrá extradicción.

A fines de 2009, cuando el vocero de la Casa Rosada, Alfredo Scoccimarro, asumió su cargo, Paula Chahin Ananías, la esposa del ex líder del FPMR Galvarino Apablaza, se reunió a solas con él.

Éste era su nuevo jefe y la funcionaria de la Presidencia fue clara: le informó con quién estaba casada.

Scoccimarro, lejos de sorprenderse, le respondió: "Eso no es relevante para mí, su refugio está en estudio, acá lo importante es que hagas bien tu trabajo", señala un cercano al episodio.

Desde entonces, la profesional recibió diversas tareas de confianza. Así, cuando el pasado 2 de agosto se reunieron los ocho ministros del Consejo de Cancilleres del Mercosur, en San Juan, Argentina, en la sala del Centro Cívico también se hallaba Paula Chahin.

La periodista acudió como representante de la Subsecretaría de Medios de la Casa Rosada, con las más altas autoridades del gobierno de Cristina Fernández.

Pese a que la delegación chilena no la reconoció, la anécdota grafica la cercanía de Chahin con el kirchnerismo.

Según su familia en Santiago, Chahin llegó a trabajar a la Casa Rosada "hace poco más de dos años y tiene llegada directa con la Presidenta Cristina Fernández".

Ex colegas de Chahin de los desaparecidos diarios "La Época" y "Fortín Mapocho", donde trabajó a fines de los años 80, la consideran una profesional sobresaliente.

"Habla inglés y francés, se maneja perfecto en la historia latinoamericana. Además es trabajólica y carismática", señala uno de sus ex jefes.

Quizás por ello sus cercanos destacan que desde que se radicó en Buenos Aires, en 1994, construyó una red de contactos privilegiados en Argentina, entre los que se destacan el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, la ex candidata a la Presidencia Patricia Walsh (hija de un célebre periodista desaparecido), las dirigentas de las Madres y Abuelas de la Plaza de Mayo Buscarita Roa y Hebe de Bonafini, y diversos abogados. Todos ellos apoyan el refugio de Apablaza. Chahin también mantiene contacto con Claudio Molina, un ex integrante del FPMR, refugiado en Argentina desde el 2001.

Según los Chahin, en varias ocasiones ella ha invitado a sus padres y familiares a alojar en una residencia que pertenece a la Presidencia, "aunque pocos han aceptado".

Hasta 2004, para la mayoría de los Chahin la vida de Paula era un enigma. Sólo sabían que era corresponsal de diversos medios y que trabajó en un municipio de Buenos Aires durante el gobierno de Néstor Kirchner. "Sabíamos que estaba emparejada con un ingeniero eléctrico, "Héctor Mondaca" (como se hacía llamar Apablaza), un tipo que nos resultaba raro. Sólo en 2004 supimos su real identidad. Nosotros somos de derecha, y eso dividió a la familia, no podíamos creerlo", señala una tía de Chahin.

Sus contactos con el FPMR habían llegado por azar. En el colegio The Grange School conoció a Cecilia Magni, la comandante "Tamara", quien fue encargada del FPMR en Rancagua, y junto a su pareja, Raúl Pellegrin, también frentista, fueron abatidos tras el ataque a una comisaría en Los Queñes, en 1988.

Luego de egresar de la Universidad Católica, Chahin llegó en 1991 al área de reportajes de La Nación. Fue en abril de 1991, días después del asesinato de Jaime Guzmán, del cual se acusa a Apablaza de estar involucrado, cuando Paula lo conoció. Hizo una cita con el llamado comandante "Salvador" mientras hacía un reportaje del FPMR.

"En esa entrevista, 'Salvador' le dijo que el Frente estaba quebrado entre los oficiales formados en la Escuela Militar Cubana y los formados como guerrilleros urbanos, que no combatieron fuera de Chile, como Mauricio Hernández Norambuena", revela uno de sus ex compañeros de trabajo.

La historia de amor de ambos no fue fácil. "Hasta 1994, los Chahin Ananías no aprobaban la relación. Aún cuando ni siquiera sospechaban quién era su novio. Principalmente su papá, Enrique Chahin, quien era un dentista con grado de comandante en Carabineros, y su hermano José", señala un familiar.

Paralelamente, en casa de los Apablaza Guerra poco sabían de Paula. "No sé nada de la historia de amor entre Paula y Sergio. Nosotros no fuimos al matrimonio, porque teníamos y tenemos muy poco contacto con su familia. José (hermano de Apablaza) tampoco lo ve mucho. Lo que más hemos sabido ha sido por la prensa, y lo que pudiéramos saber no se lo podemos comentar. Pero estamos esperanzados en que todo resulte bien en Argentina", señala una cuñada de Apablaza.

El rechazo de la familia de Chahin a Apablaza cambió en 1995, cuando nacieron los dos mellizos de esa unión, y sus padres aceptaron al señor "Mondaca". "Cuando nacieron, los papás se pusieron muy contentos y se creyó en el matrimonio. Ahora, Enrique Chahin reconoce que este caballero (Apablaza), a pesar de sus antecedentes, ha sido un padre ejemplar", dice un pariente que prefiere mantener su nombre en reserva.

Reporteros argentinos aseguran que sus contactos con el kirchnerismo son variados, pero que su mayor sustento es Hebe de Bonafini, presidenta de las Madres de Plaza de Mayo y muy cercana a los Kirchner.

Según cercanos a Chahin, ella confía en que los Kirchner no expulsarán a Apablaza, porque han mostrado una sensibilidad en el tema de los militantes de izquierda y le concederán el refugio. Además, la reportera afirmaría en su círculo íntimo que la decisión para asesinar a Guzmán no fue de su pareja. Tal como Chahin señaló a "El Mercurio", en una entrevista en 2004, está convencida de que su esposo "no tiene responsabilidad penal en el crimen del senador de la UDI" y que ha sido procesado sin haber declarado. "Por eso digo que Salvador ya está juzgado en Chile, donde hay una jauría esperándolo", afirmó en esa oportunidad.