El Gobierno aseguró que tomará "todas las medidas que pueda" para evitar la suba de los precios de la canasta básica alimentaria, que se dispararon entre 30 y 50 por ciento en el último año, a pesar de que el INDEC manipula las estadísticas.

Así lo aseguró el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. "Hay medidas que se pueden tomar y otras que no. Por eso yo no defiendo al que aumenta los precios y, si puedo, lo apunto con un dedo índice muy grande", sostuvo. En ese sentido, el funcionario volvió a culpar a los empresarios y a desligar a las políticas oficiales.

En declaraciones a radio Uno, Fernández aseveró que el Gobierno tomará "todas las medidas que sean posibles" contra la suba de los precios y advirtió que "ni una se va quedar detenida".

Además, Fernández lamentó que quedó "como el diablo" con su "amigo" Amado Boudou, el ministro de Economía, por su diferencia de opiniones respecto de la inflación, y aseguró que él no desacredita "a nadie".

"Yo quedé como el diablo con mi amigo. Pareciera que yo salí a desacreditarlo", se quejó el funcionario, quien la semana pasada disintió con el titular del Palacio de Hacienda luego de que éste dijera que la inflación "tal vez preocupe a la clase media-alta", al sostener que el incremento en los precios de los alimentos impactaba "más fuertemente" en los sectores de menores ingresos.

En declaraciones a radio Continental, el jefe de ministros objetó que en algunos medios de prensa "colaron las dos cosas y dijeron 'Aníbal desacreditó a Boudou'".