Científicos descubrieron que las tabacaleras le suman azúcar y otros aditivos para cambiar el sabor. Son maniobras deliberadas para captar público joven
El Comité Científico de Riesgos Emergentes para la Salud concluyó que los aditivos añadidos a los cigarrillos para mejorar su sabor, como el mentol o las frutas, puede incrementar el grado de adicción al tabaco.
Dicho comité, formado por expertos independientes designados por la Comisión Europea (CE) considera que la publicidad, el diseño y el precio de los cigarrillos podrían operar de manera similar sobre el consumidor, influyendo en sus patrones de consumo e incrementando su adicción.
Los expertos manifestaron en sus conclusiones que los aditivos aumentan el atractivo del cigarrillo , facilitan una inhalación más profunda y fomentarían el potencial adictivo de la nicotina.
Además, consideran que los sabores agregados o azúcares, al resultar más atractivos podrían acelerar la iniciación de los jóvenes en el hábito de fumar.