La zona denominada Club de Golf de Pinamar fue el escenario para un peculiar circuito delictivo que tuvo como saldo los objetos de valor de cuatro casas vecinas del exclusivo barrio de la ciudad balnearia.

Se cree que los delincuentes, que serían menores de edad, actuaron entre las 3 y las 5 de la mañana del viernes.

Los jóvenes delincuentes ingresaron a los lujosos chalets sin violentar cerraduras y se cree que utilizaron un sistema de imanes para abrir las puertas, según cuenta el diario Clarín.

Las cuatro casas víctimas de los hurtos se encuentran en las calles De las Garzas, Nautilus y Del Chingolo, conocidas por las imponentes residencias que se encuentran en esas arterias de Pinamar.