El 15% de los homicidios en la provincia de Buenos Aires fue cometido por menores de 18 años.

Así lo reflejan los datos brindados de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, correspondientes al primer semestre de 2010.

Mientras esos chicos entraban en conflicto con la ley penal, en el Congreso hacía un año que los legisladores habían congelado la discusión sobre si es necesario bajar la edad de imputabilidad de los menores, que hoy es de 16 años, según consigna el diario La Nación.

En noviembre de 2009 el Senado aprobó un proyecto de ley para bajar a 14 años la edad de imputabilidad penal, además de crear un régimen específico para menores y garantizar derechos a la defensa.

La iniciativa pasó a la Cámara de Diputados, donde se encuentra bloqueada.

El argumento más esgrimido para justificar la postergación del debate fue que sólo el 4 por ciento de los delitos son cometidos por menores. Los diputados usaron como dato las estadísticas de la Suprema Corte bonaerense.

Pero esa cifra incluye todos los delitos cometidos tanto por adolescentes como por adultos. Es así que el porcentaje crece si se analizan los casos de homicidios.

En el primer semestre de 2010, los menores fueron responsables de 87 crímenes (sobre 564) y 85 intentos de homicidio (sobre 458) en la provincia de Buenos Aires. También estuvieron acusados en 1282 casos de robos con armas de fuego.

En 2009, la cifra total de crímenes cometidos por menores en territorio bonaerense fue 165.

Pero, si bien el debate reflotó en estos últimos días, hay dos proyectos de régimen penal juvenil. Por un lado, está el proyecto oficial, que ahora parece no contar con el visto bueno de la Presidenta, tendiente a mantener la edad de responsabilidad penal en 16 años y no permitir penas mayores de tres años por homicidio.

Por otro, el Peronismo Federal, Pro, parte del radicalismo y Elisa Carrió apuntalarán los cambios previstos por los senadores. En ese proyecto se contempla disminuir la edad de imputabilidad a 14 años y castigar con penas escalonadas en dos franjas (14/15 y 16/17) los homicidios con tres y cinco años, respectivamente.

De todas maneras, el proyecto más duro está lejos de las leyes juveniles que rigen en otros países. En Brasil, la responsabilidad penal empieza a los 12 años, mientras que en Inglaterra a los 10 años ya puede ser condenado un chico por un homicidio con penas similares a las de los adultos.

También en Francia se prevén castigos de 20 años de prisión para homicidas mayores de 13 años.

En el mundo éste ya casi no es un tema de debate. En la Argentina, algunos justifican los crímenes por la pobreza estructural y la falta de contención familiar que pueden sufrir los menores. Mientras esa polémica entretiene a los legisladores, más de 170 personas pierden todos sus derechos al morir cada año a manos de menores.