Otra vez los cuatriciclos manejados por menores de edad vuelven a ser el foco de conflicto. Esta vez, un niño de 6 años atropelló en Pinamar a otro de 4 con un cuatriciclo.

El vehículo le pasó por arriba con sus ruedas. Le provocó golpes importantes y un corte en el rostro, excoriaciones en el torso y una fisura en el hueso malar.

La tragedia estuvo cerca para un niño de cuatro años que fue atropellado por un cuatriciclo conducido por otro de apenas seis años en el norte de esta ciudad.

El accidente se produjo el fin de semana pasado en un parador de la zona norte y la víctima, de nombre Baltasar, fue derivada al hospital municipal.

El director de Salud de Pinamar, Omar Curto, confirmó que al menor se le practicó una sutura en la mejilla y se le realizaron placas radiográficas, a través de las cuales no visualizaron lesiones óseas. Pero contó a La Nacion que un familiar del pequeño llamó en las últimas horas desde Buenos Aires para avisar que, tras una tomografía, al niño se le detectó una fisura en el hueso malar, que no implica gravedad.

El hecho ocurrió en arenas cercanas al balneario La Frontera. El conductor del cuatriciclo, que habría tomado el vehículo sin permiso de sus padres, perdió el control del volante y arrolló al más pequeño, que se encontraba jugando a pocos metros de sus familiares.

Los padres del niño herido presentaron la denuncia en sede policial, lo que derivó en una causa judicial por "lesiones culposas", que se tramita en el Tribunal de Menores de Dolores.

Niños y adolescentes al volante de cuatriciclos son un problema histórico en Pinamar. Según confirmó ayer el director de Tránsito local, Jorge Ferreiro, más del 25 por ciento de los cuatriciclos secuestrados aquí durante la actual temporada corresponde a conductores menores de edad.

Este accidente se asemeja a otro que data de igual época del año pasado y que fue protagonizado en Cariló por un hijo del futbolista Juan Sebastián Verón. En aquella oportunidad, el menor circulaba al volante de un cuatriciclo por la zona del parador Hemingway cuando atropelló a una joven que se había tendido sobre la arena para tomar sol.

Ferreiro explicó a La Nacion que la cantidad de cuatriciclos tiene aquí un crecimiento significativo con respecto a la temporada anterior. Y también destacó el esfuerzo que se pone para controlar a esos vehículos y sus conductores. "Ya secuestramos 600 en lo que va de este verano", afirmó.

Dijo, además, que 180 de esas unidades se incautaron porque eran conducidas por menores que, por tal condición, no pueden acceder a la licencia habilitante. El resto, correspondió a problemas de documentación o falta de uso de casco.

"No hay restricciones para que transiten por la ciudad", explicó Ferreiro, aunque aclaró que se recomienda evitar las calles céntricas tanto como se pide prudencia al circular por sectores de playas.

También dejó en claro que las empresas de alquiler de cuatriciclos no pueden alquilar estas unidades a personas que no tengan permiso para conducir que los habilite para estar al volante de este tipo de vehículos.

En Cariló, y antes del comienzo de la temporada, se había lanzado una campaña de prevención de accidentes de tránsito. Allí se marcaban recomendaciones para la circulación en motovehículos por este balneario. Y se hacía una especial advertencia: "Los cuatriciclos no son un juguete".