La megacausa que investiga la denominada mafia de los medicamentos acaba de sumar un nuevo detenido: el empresario y ex gerenciador del PAMI Rubén Darío Romano, titular de la droguería Romala, que proveía remedios a obras sociales.

La detención fue dada a conocer por el portal de noticias del Poder Judicial. Romano está acusado del delito de defraudación a la administración pública y estaba prófugo de la Justicia.

A Romano se lo investiga a raíz de una denuncia de Graciela Ocaña por la venta de medicamentos a través de Sebastián Forza (asesinado en el Triple Crimen de General Rodríguez) a la Obra Social del Personal de Agua y Energía Eléctrica de Mendoza. Estos se pagaron con fondos de la Administración de Programas Espaciales (APE) de las obras sociales en base a expediente irregulares.

La APE es un fondo solidario de unos 1.000 millones para financiar tratamientos médicos caros como los del SIDA. La maniobra era inventar pacientes o falsificar troqueles de remedios para presentarlos al APE y cobrar esos subsidios.

Romano dirigía una prestadora del PAMI, Abril, cuando Alderete dirigía el organismo. Según Ocaña, Romano administró hasta 1999 contratos por 4,2 millones de dólares por mes.

El fiscal Carlos Stornelli había investigado a Romano en 2007 por presunto lavado de dinero. El juez federal que estaba a cargo le había pedido al empresario informes sobre dos giros de a las islas Caymán. Uno de 270 mil y el otro de 480 mil dólares.