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29 de marzo de 2024
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Feroz ataque a una embarazada de 8 meses en Virreyes
Fue en un violento asalto a una casa de deportes. La joven es hija de María Elena Leuzzi, presidenta de la asociación de Ayuda a Víctimas de Violación
6 de marzo de 2011
Una embarazada de ocho meses fue golpeada de manera salvaje en la panza durante un robo ocurrido en las últimas horas en el partido de San Fernando.

Rocío, quien es la hija de María Elena Leuzzi, presidenta de la asociación AVIVI (Ayuda a Víctimas de Violación), fue víctima de dos delincuentes, un hombre y una mujer, durante un asalto en una casa de deportes de la localidad bonaerense de Virreyes.

La joven, de 24 años, había ido a pagar un crédito a ese comercio, ubicado en la calle Avellaneda al 1900, cuando ingresaron los ladrones, que la golpearon de manera violenta en la panza y en otras partes del cuerpo, mientras que luego fue encerrada en un baño.

"No entendía nada, sólo quería defender y cubrir mi panza, y a mi bebé. Me pegaron con la culata de un arma y me encerraron en un baño a los golpes, donde había otras personas ya encerradas. Estoy muy angustiada porque en un momento pensé que iban a matarme o matar a mi bebé", agregó entre lágrimas la joven.

"Ella, le decía al tipo 'vamos a salir con ella de escudo', pero no se lo permitieron los empleados del comercio", añadió la víctima.

Tras el asalto, los ladrones escaparon con varias bolsas con indumentaria y se subieron a una moto, pero como no arrancó huyeron a pie mientras el hombre realizó un disparo para amedrentar a cualquiera que intentara detenerlo.

Sin embargo, su cómplice fue atrapada por el custodio de otro comercio cuando estaba por agarrar una de la bolsas sustraídas que se le había caído.

Posteriormente, la delincuente fue entregada a la Policía, mientras que Rocío se recupera en su casa del susto, aunque continúa con una crisis nerviosa.

"Estamos muy desesperados en casa, faltan veinte días para que nazca Valentina,
y por nuestra cabeza pasa el caso Píparo, estos salvajes tiraron un tiro al montón y pudieron matar a mi hija y a mi nieta", dijo Leuzzi.

La titular de AVIVI agregó que su hija sufre "las secuelas del brutal hecho, no puede dormir y se la pasa llorando, mientras acaricia su panza".

El hecho es investigado por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 2 de San Fernando, a cargo de Alejandro Musso.