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25 de abril de 2024
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Escándalo y protestas en el festival de La Vendimia
Como no les dieron entradas habituales que reciben para sus familias, los artistas resolvieron no salir. La gente reaccionó. Cobos estaba entre el público
7 de marzo de 2011
Bochorno en el tradicional Festival de La Vendimia.

Un reclamo de los artistas a minutos del comienzo de la repetición del Acto Central de la Fiesta Nacional de la Vendimia derivó el domingo por la noche en la sorpresiva suspensión del espectáculo.

Luego de una larga espera, finalmente se confirmó que no se realizaría el show.

El público, que había soportado inclusive la lluvia, estalló en bronca, comenzó a tirar botellas, cajas de vino y manzanas al escenario, a insultar y a gritar "ladrones, ladrones".

Eran aproximadamente 20 mil personas las que estaban en el teatro griego Frank Romero Day, entre ellas el vicepresidente Julio Cobos.

La protesta se produjo porque el Gobierno al parecer le había prometido a los artistas dos entradas a cada uno para la tercera noche, que estaba programada para hoy.

Esos tickets nunca llegaron porque estaban agotados, y los bailarines y actores decidieron no salir a escena.

Para intentar contener la furia popular, los organizadores recurrieron a animadores y música. Nada funcionó. Ni siquiera el reconocido cantante mendocino Natalio Faingold pudo evitar el descontento de la gente.

El show duró sólo dos canciones, y en medio de los abucheos la banda abandonó el escenario mientras el vocalista reclamaba que salieran los bailarines.

El funcionario político encargado de la Fiesta, el secretario de Cultura Ricardo Scollo, intentó dar explicaciones y aseguraba que los bailarines saldrían a escena.

Ya eran las 23 y nadie le creyó. "Devuelvan la plata, devuelvan la plata", le gritaban. A esa hora, gran parte del público se había retirado.

"Reclamamos por un derecho histórico. Y en realidad es un hartazgo de muchas cosas: camarines improvisados, sanitarios colapsados, entre otras cosas", decía un representante de los artistas.

“No imaginé que tuvieran la inconciencia de hacer lo que hicieron. Éste es un conflicto entre un grupo de artistas, no más de 40 personas y el Estado. El reclamo puede o no puede ser genuino, pero si se para una fiesta con 25.000 personas en las gradas, hay un inconciencia muy grande”, aseguró Walter Neira, director de la Fiesta.

Mientras toda Mendoza habla del "papelón de la Vendimia", hoy el gobernador Celso Jaque dará una conferencia de prensa donde se darán detalles de lo ocurrido y se notificará qué pasará con la segunda repetición prevista para este lunes.