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28 de marzo de 2024
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Crisis financiera general por la caída de la bolsa de Japón
Japón tuvo que lanzar hasta ahora US$ 980.000 millones. El Nikkei se desplomó más de 10%. Las Bolsas europeas son arrastradas por la caída de las acciones en Tokio
15 de marzo de 2011
El Banco Central de Japón tuvo que salir a inyectar millones de dólares a su sistema financiero para tratar de calmar los temores de los bancos, abrumados por el impacto del catastrófico del sismo y el tsunami.

Las acciones de Tokio tuvieron una caída por segundo día consecutivo mientras se intensifica una crisis nuclear en el noreste del país.

Dos inyecciones de efectivo que suman un total de 980.000 millones de dólares (8 billones de yenes) se producen un día después de que el Banco de Japón alimentara los mercados financieros con 184.000 millones de dólares (15 billones de yenes) y adoptara otras medidas para proteger la débil economía nacional después del terremoto de una magnitud de 8,9 en la escala de Richter que ha causado miles de muertes.

Las inyecciones han ayudado a estabilizar los mercados actuales, pero las Bolsas de valores se fueron en picada por segundo día consecutivo mientras los inversionistas se deshacen de sus activos ante la creciente preocupación de una crisis nuclear.

"Japón será más pobre por este desastre", aseguró Peter Morici, profesor de negocios de la Universidad de Maryland. "La reconstrucción acabará con la salud financiera", de la hasta ahora nación más rica de Asia.

El índice bursátil de referencia, el Nikkei 225, cayó hasta en un 14% después de que el primer ministro Naoto Kan pidiera a los habitantes de la zona cercana a una planta de energía nuclear afectada por el tsunami, que permanecieran en sus hogares ante el riesgo de contraer alguna enfermedad por la radiación. El índice cerró el martes con una disminución del 10,6% para quedar en 8.605,15 unidades.

Ante esta pérdida, el Banco de Japón maniobró con rapidez y puso a disposición de los mercados millones de dólares. Con esta afluencia masiva de dinero, el Central japonés confía en que los grupos financieros mantendrán el crédito y satisfarán el aumento en la demanda de recursos que se prevé para la reconstrucción del país.

Los nueve integrantes de la junta de política monetaria del Banco Central japonés se reunieron brevemente y aprobaron por unanimidad las medidas.

La entidad ampliará su actual programa de compra de activos – ya sean bonos del gobierno o de corporaciones- en cinco billones de yenes a un total de 40 billones de yenes (486.400 millones de dólares). El banco también decidió que mantendrá su tasa básica de interés prácticamente en cero.