El canciller de Uruguay, Luis Almagro, expresó la satisfacción del gobierno de José Mujica ante la caída del líder de la banda terrorista Al Qaeda, Bin Laden, y resaltó que se trata de un hecho "positivo".

"Consideramos que constituye un golpe al terrorismo de una persona que tenía cuentas pendientes con la justicia y con el mundo", destacó Almagro en rueda de prensa, precisando que la noticia fue el primer tema abordado este lunes en el Consejo de Ministros presidido por el presidente José Mujica.

"Si bien ninguna muerte puede ser celebrada, tampoco podemos dejar de permanecer atentos a que el terrorismo debe ser condenado y que no debemos ser ajenos al respecto", añadió. "Por lo tanto rescatamos lo positivo de este tema, cómo se ejecutó el mismo y definitivamente lo positivo es el golpe asestado al terrorismo internacional".

Por su parte, y por intermedio de su canciller, el gobierno del chileno Sebastián Piñera calificó como "una buena noticia" la muerte del líder del grupo terroristas Al Qaeda, Osama Bin Laden.

Desde Roma, el ministro de Relaciones Exteriores dijo que con esta acción se demuestra que "cualquiera que esté involucrado en un acto de terrorismo, al final va a ser encontrado y va a ser castigado".

"Uno puede escapar de la justicia tanto tiempo, pero al final no importa en qué país esté, o cuantos medios tenga, o cuanto se mueva de un lugar a otro, al final igual es encontrado y en este caso muerto", dijo Moreno.

Tras la noticia de la muerte de Osama Bin Laden, el canciller peruano, José García Belaunde, extendió las felicitaciones del gobierno de Alan García a su par norteamericano, Barack Obama.

El canciller dijo que "primero se deben extender las felicitaciones a Estados Unidos por el éxito de esta operación que corona el esfuerzo de años por tratar de ubicar al jefe de Al Qaeda y desmantelar a la cabeza de esta organización terrorista mundial".

El presidente norteamericano Barack Obama anunció la muerte de Bin Laden la noche del domingo, casi diez años después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 que dejaron unos 3.000 muertos.