Detuvieron en Irak a un funcionario acusado de haber grabado con un celular la ejecución de Saddam.

No se reveló su identidad, pero sí que se trata de alguien que debía supervisar el ahorcamiento del ex dictador.

A diferencia de las imágenes oficiales, el video captado por esta persona con un teléfono móvil mostraba toda la ejecución y dejaba escuchar insultos contra Hussein.

Su difusión en TV e Internet causó protestas en varias partes del mundo.