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Gimnasia y Racing un empate sin goles que nadie festejó
El Lobo quedó en zona de promoción y la presión de terminar la fecha en descenso directo. Racing aún dentro del grupo de copa sudamericana aunque muy complicado
5 de junio de 2011
Gimnasia y Racing empataron sin goles en La Plata en un resultado negativo para ambos que dejó a los platenses en una zona complicada por le descensos y a la Academia también complicada con el deseo de alcanzar una plaza en la Copa Sudamericana

El comienzo del partido mostró mejor parado a Racing, con Yacob como eje en la mitad de la cancha y los laterales, Licht y Pillud, proyectándose continuamente. Arriba, Teo Gutiérrez preocupaba a la defensa local.

A los 11 minutos, una media vuelta suya fue bien tapada por Monetti y a los 15, en una muy buena jugada del visitante, el colombiano definió apenas desviado a pase de Franco Zucculini. Toranzo, a los 22, hizo volver a revolcarse al arquero platense, de buena actuación.

Lo de Gimnasia, si bien tuvo buenas intenciones, era algo tibio. Recién a los 27 minutos pudo arrimar peligro al arco de Fernández, cuando Favale le anuló mal un gol a Barros Schelotto por un offside que no fue tal. El mellizo, que partió habilitado por la lúltima línea de la defensa de Racing, protestó airadamente la sanción de Favale.

El segundo tiempo parecía arrancar con todo. A los 3 minutos, Teo Gutiérrez, el más peligroso de la cancha, exigió nuevamente a Monetti, que sacó al córner. Después de esto, el partido se puso caliente. En una misma jugada se pegaron Yacob, Neira, Barros Schelotto y Pillud, mientras que Favale optó por no hacer nada.

Cuando todo era confusión de los dos lados, Encina se acordó de jugar y probó a Fernández desde lejos, que contuvo sin problemas a los 24 minutos. Apenas después, Licht se sacó de encima una pelota que entre el arquero platense y el travesaño evitaron el festejo del visitante.

Sobre el final pudo ganarlo Racing, después de que Gutiérrez baje un centro de Viola y reviente el palo derecho del arquero local. Al partido le quedó sólo la expulsión de Córdoba, ingresado por Graf, por agredir a Matías Martínez.