Durante cerca de dos años el hombre -26 años, dueño de una pequeña empresa del partido de La Matanza- abusó de la hija de su pareja. Pero la historia llegó a su fin cuando la mamá de la niña en cuestión, al limpiar el cuarto de la nena (hoy de ocho años), encontró el diario íntimo que su hija había empezado a escribir hace poco tiempo y que había escondido debajo de su cama.

"Allí la chiquita describía cómo su padrastro la obligó desde los seis años a prácticas aberrantes. Empezó así y luego comenzó a violarla", contó a Clarín un investigador que estuvo a cargo de apresar al acusado.

La detención se concretó en La Matanza, luego de que el sospechoso estuviera prófugo durante varios días. De acuerdo a fuentes policiales, se había escondido en la casa de unos amigos, en la provincia de Mendoza.

El escándalo familiar, además, dejó al descubierto un segundo drama: luego de realizada la denuncia policial, una sobrina del comerciante (una nena de 12 años) tuvo una crisis de nervios y reveló que a ella también la violaba. No se había animado a decir nada por temor .

La causa -hoy con dos víctimas del mismo hombre- comenzó a principios de la semana pasada. La madre leyó las anotaciones en el diario de su nena y corrió a buscarla al colegio. A solas le preguntó sobre lo que había leído en él. La nena, llorando, le contó todo : su padrastro abusaba de ella en una de las habitaciones de la casa en momentos en que no había nadie más en el lugar.

"Cuando el hombre llegó a la casa ese día, la mujer lo encaró e insultó. El escapó a Mendoza y la mujer hizo inmediatamente la denuncia policial en la Comisaría de La Tablada, donde viven, así que comenzamos a seguirle los pasos", completó la fuente consultada por Clarín .

Mientras los policías de la DDI de La Matanza trataban de ubicar al acusado -quien estuvo a punto de fugarse a Chile- surgió la segunda acusación: la hija del hermano del hombre (sobrina directa del acusado) tuvo una crisis y aportó más pruebas contra él.

De ella también había abusado durante los últimos dos años .

En la causa penal, que quedó a cargo de la Justicia de Menores de la Matanza, se ordenaron y concretaron pericias médicas y psicológicas a la chiquita de ocho años por la que se había abierto la causa originalmente. Y, según trascendió ayer, ambos exámenes confirmaron los abusos . Ahora resta que la segunda nena también sea revisada.

El hombre cayó finalmente detenido porque, enterado de que su pareja había radicado la denuncia policial, decidió volver a La Matanza para convencerla de que la retirara. Para ese entonces la Policía ya estaba siguiéndole los pasos. Por eso ayer, cuando llegó al barrio para intentar reunirse con su pareja, fue detenido y puesto a disposición de la Justicia.