Se registran los primeros enfrentamientos entre los sindicalistas que pararon por 24 horas para protestar contra la crisis económica que golpea al país heleno y las fuerzas del orden. Los dos principales sindicatos repudian el programa de recortes del gobierno con medidas que paralizan ampliamente los servicios públicos.

El tráfico aéreo estaba suspendido desde la medianoche del miércoles debido a la huelga de los controladores aéreos prevista hata las 0 horas del jueves. Todos los vuelos a Grecia estaban suspendidos.

Pese a ello no se vio a muchos pasajeros varados, ya que las compañías aéreas habían informado a tiempo a sus clientes, según el aeropuerto de Atenas. Tampoco los trenes circulan desde la medianoche. Los conductores de autobús dejarán de trabajar durante tres horas por la mañana y otras tres por la noche. Las huelgas alcanzan también a ministerios, empresas estatales y colegios, que suspenderán todas sus actividades durante 24 horas.

Los médicos en los hospitales del Estado sólo atenderán urgencias. Las huelgas fueron convocadas por los principales sindicatos del sector estatal (ADEDY) y privado (GSEE). El gobierno heleno planea el despido de unos 30.000 funcionarios públicos.

El programa de recortes prevé también un ahorro de otros 6.500 millones de euros (8.700 millones de dólares) en los próximos meses.

Grecia depende de las ayudas de la eurozona y del Fondo Monetario Internacional, que decidirán en breve sobre la concesión del siguiente tramo del paquete de rescate al país heleno. Los créditos tienen como condición un duro programa de ajustes.