Una decena de barrios del extremo noreste de esta capital continuaban esta mañana anegados después que entre las 20 de ayer y las 3 de la mañana de hoy precipitaran 240 milímetros en barrios más castigados y unos 150 milímetros en el macrocentro y barrios del sur.

El trabajo de bombas extractoras resultaba insuficiente por deficiencias en los canales de desagüe y centenares de familias de los barrios Yapeyú, Santa Rita, Jardín Botánico, Don Bosco, Transporte, y otros, no podían concurrir a sus labores habituales porque la inundación impedía el ingreso del transporte público de pasajeros. Establecimientos escolares dictaban clases parcialmente, pero mantenían abiertos los comedores para brindar asistencia a la población afectada.

Anoche, pasadas las 20.30, toda la ciudad presentaba anegamientos que dificultaron el desplazamiento vehicular, mientras se registraban pronunciados cortes en el servicio de energía eléctrica, que recién a la madrugada pudieron ser subsanados.

La región central de la provincia continuaba bajo alerta meteorológico, aunque las precipitaciones ya no eran intensas.

Un panorama similar vivían poblaciones de los departamentos Vera, San Javier y General Obligado, donde los promedios de lluvias superaron los 100 milímetros en pocas horas.

La provincia y los municipios coordinaban la ayuda a los damnificados.