Sin cifras oficiales, varios centros de ex combatientes de la Guerra de Malvinas sostienen que las víctimas posteriores a 1982 han superado la cifra de
fallecidos en el conflicto bélico entre la Argentina y Gran Bretaña que alcanzó a 649 efectivos.

Desde el mismo momento del regreso, muchos ex combatientes se suicidaron por causas vinculadas con las secuelas de la guerra y el destrato recibido por la sociedad y los sucesivos gobiernos.

Las cifras de muertos varía entre 370 y 480 como cifras "oficiales" en los diferentes centros de ex combatientes consultados, aunque en todos los casos se indicó que el número supera al de caídos en el conflicto si se tiene en cuenta a los
ex soldados que sufren problemas psicológicos.

Pedro Barrera, ex combatiente de Malvinas, señaló a la agencia Noticias Argentinas que "cuando se sabía de casos de ex combatientes que se suicidaban se buscaba ayuda en los gobiernos, se intentaba que se abrieran registros para estos hechos pero
nunca se tuvo respuesta para poder contenerlos".

Voceros de otro centro de ex combatientes de Corrientes, donde se lleva, según precisaron, "un control estricto" de muertes después de la guerra y "heridos permanentes", se sostuvo que la cifra de caídos supera las "750 víctimas".

Sin embargo, en todos los casos se coincidió en afirmar que "no sirve, por duro que es el reflejo de la realidad posterior de la guerra, separar muertos durante el conflicto y después: los muertos son todos del mismo problema".

La cifra de muertos argentinos en combate es de 649, según precisaron fuentes oficiales.

De esas víctimas, 323 era integrantes del Crucero general Belgrano, hundido el 3 de mayo de 1982 y el resto murió durante los combates en las islas o en operaciones de la Fuerza Aérea.