Imitando al gran Sergio Goycochea en la semifinal de Italia 90, el arquero Sergio Romero nos depositó en la quinta final de la historia mundialista
Emulando la hazaña de Sergio Goycochea en la semifinales de la Copa del Mundo de Italia 1990, cuando atajó dos penales a los locales y provocó la clasificación de aquel seleccionado a jugar la final de ese torneo, 24 años después, Sergio Romero se calzó el mismo traje de héroe y posibilitó que Argentina llegue al partido decisivo de Brasil 2014.
La definición empezó de la mejor manera, como todos soñarían una serie de penales.
Holanda comenzó pateando los penales y Sergio Romero se lo atajó a Ron Vlaar.
Después, Lionel Messi y Ezequiel Garay hicieron sus goles. Hasta que Chiquito dejó nocaut al equipo naranja cuando desvió el tiro de Wesley Sneijder.
Maxi Rodríguez convirtió el propio y la Argentina, después de 24 años, como fue en aquella semifinal de 1990, llegó a la final desde los 12 pasos.
"Es una alegría inmensa. Es suerte, en realidad", dice Romero después del partido. "Tenía confianza, y gracias a Dios se me dio", agregó.
En cuanto al partido definitorio ante Alemania (otra coincidencia de Italia 90), Chiquito aseguró que "la esperanza está intacta".
"Nos vamos contentos y a partir de mañana prepararemos el partido", añadió.
Y dejó un mensaje para los 40 millones de argentinos: "Disfruten este momento. Nosotros vamos paso a paso".