El ministro del Interior, Aníbal Fernández, afirmó hoy que si el gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch o la Justicia, le piden que envíe gendarmes a la provincia para evitar eventuales disturbios, lo hará.

El minsitro aclaró que hasta ahora el Gobierno no aportó refuerzos en materia de seguridad porque no se lo solicitaron.

En cambio, informó que sí despachó a cien gendarmes a la provincia de Santa Cruz, donde también se desataron graves conflictos docentes, porque así se lo solicitó el gobierno de esa provincia.

El ministro sostuvo que Sobisch tiene "una visión absolutamente distinta" a la del gobierrno nacional, pues exhibe actitudes de "dureza extrema que lo lleva a situaciones" como la ocurrida el miércoles pasado, cuando la policía reprimió una protesta docente y asesinó a uno de los manifestantes, el profesor Carlos Fuentealba.

Fernández negó que el presidente Kirchner haya mantenido silencio sobre la crisis en Neuquén, que recién rompió ayer.

El ministro dijo que apenas ocurrido el asesinato del docente Carlos Fuentealba Kirchner expresó su "consternación", aunque lo hizo a través de una declaración emitida exclusivamente por la agencia de noticias Télam que, destacó, "es la agencia del Estado".

El titular de la cartera de Interior también se refirió a la ausencia del presidente Néstor Kirchner en el acto por el 25 aniversario de la guerra de Malvinas y afirmó que Kirchner, "diez días antes" había avisado al gobierno de Tierra del Fuego que no asistiría.

Fernánez justificó que Kirchner no haya asistido al acto y sostuvo que el Gobierno expresa su respaldo a los veteranos mejorando su situación económica.