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Cómo fue Gran Hermano 2007
Aquí, todos los hechos, visitas de famosos, anécdotas, peleas, amores y desamores que ocurrieron en la casa más famosa del país desde que comenzó el programa
3 de mayo de 2007
Esta edición de Gran Hermano tuvo todos los condimentos que cualquier programa de televisión debe tener: peleas, llantos, cruces verbales, chicas hot y hombres carilindos en paños menores, parejas enamoradas, triángulos amorosos, personajes oscuros, e historias terribles que fueron saliendo a la luz.

Todo esto, conformó un reality único que, con una adecuada estrategia de producción, logró picos de rating de más de 30 puntos en las galas (de nominación y de eliminación) y hasta 25 puntos en los especiales y en “GH: El debate” que conduce Mariano Peluffo.

Además, esta edición de Gran Hermano 2007 promete otro récord… de facturación. Un negocio redondo en el que participan los propios concursantes (aunque como socios ultra minoritarios), Telefe y la productora Endemol, dueña del formato.

El comienzo del juego: intrigas y polémica desde los primeros días

A poco menos de una semana de empezado el programa, aparecieron las primeras “historias ocultas”. Primero, la modelo Claudia Ciardone comenzó a deambular por los medios con su escultural cuerpo de modelo (afianzado con gym y algún que otro retoque estético).


Melisa Durán, la novia de Sergio Denis, decidió “olvidarse” de él por unos besos furtivos con otro integrante de la casa, el inefable Gabriel Lagos.
Ya en la segunda semana emergió uno de las chicas emblema del escándalo: Melisa Durán, quien, lejos de mantenerse recatada (teniendo en cuenta que confesó su noviazgo con el cantante Sergio Denis), decidió “olvidarse” de él por unos besos furtivos con otro integrante de la casa, el inefable Gabriel Lagos.

A todo esto surgió un "nuevo integrante", que tiempo después cobraría mayor trascendencia, y hasta sería un producto más del mercado: el osito Nando, la mascota de Jessica Gómez. Esto hizo que a ella la reconozcan como "osito" y que, como un peluche - fetichizado, lo llevara a todos lados consigo. A tal punto, que se transformó en objeto de bromas, secuestros, confesiones, y la distinguió a Jessica sobre el resto.

Otro condimento fuerte como para atraer a la huidiza audiencia fue la formación de parejas. La primera fue la de Pablo Espósito y Silvina Scheffler. Todo surgió con la insistencia incontenible de él. Pero, si bien anduvieron juntos un largo tiempo adentro de la casa, se pasearon de la mano por todos lados y no escatimaron besos y abrazos, aunque no llegaron a tener sexo (una lástima… para el rating). Sin embargo él, en varias oportunidades, intentó más, y se lo pudo ver descargando las tensiones, propias de la abstinencia.

Nadia Epstein, a partir de un supuesto insulto de Marianela, comenzó a aislar a su rival y creó una densa atmósfera que duraría hasta que “la chica mala“ salió de la casa.

La otra pareja, que tardó bastante más en conformarse y no por su seriedad ni por el nivel de compromiso de sus integrantes, fue la de Jonathan Dieguez y Jessica “osito” Gómez. En este caso el amor llegó a rozar algunos límites corporales.

Juntos tuvieron las escenas más hot de una pareja en esta edición de GH, y hasta llegaron a “comprometerse” dentro la casa, en una ceremonia vistosa, aunque algo bizarra.

Sin embargo no fue sencillo que ellos estuvieran unidos. Las hormonas de Jonathan fluyeron primero por Mariela Montero (la sensual morocha salteña). El triángulo amoroso que conformaron rindió sus frutos en el rating, y, como en los cuentos, la historia tuvo un final feliz.

A partir de esta situación, Mariela estuvo “muy unida” a Leandro Maldonado, un joven cuyas inclinaciones difusas llevaban a controversia. De hecho el mismo Sebastián Pollastro (quien se autodeclaró homosexual dentro de la casa) intuyó algún tipo de acercamiento dudoso hacia él.

Por otro lado, esas dicotomías antagónicas que tanto nos gustan a los argentinos (Boca o River, Soda Stereo o Los Redonditos de ricota, Marcelo Tinelli o Mario Pergolini, Ford o Chevrolet) también fueron parte del programa.

Así, Nadia Epstein, a partir de un supuesto insulto de Marianela, comenzó a aislar a su rival y creó una densa atmósfera que duraría hasta que “la chica mala“ de dientes alargados y cara de pocos amigos salió de la casa. Este contexto ayudó, sin quererlo, mucho a “Male” a ganar en popularidad, básicamente por quedar expuesta y solitaria en la casa, algo que la dejó en un lugar de víctima inevitable.

En el caso de Claudia y de Griselda, la pelea se trasladó a las revistas de chimentos, y hasta ambas fueron tapa de Playboy, demostrando no sólo cualidades discursivas a la hora de presentarse en sociedad.

Por otra parte, los enfrentamientos entre Claudia (quien salió primera pero volvió a la casa luego de una dudosa votación de sus compañeros) y Griselda, Mariela y Diego, Agustín y Damián, y hasta Gabriel con su propio espejo le dieron un condimento polémico y atrayente al programa.

Claro que en el caso de Claudia y de Griselda, la pelea se trasladó a las revistas de chimentos, y hasta ambas fueron tapa de Playboy, demostrando no sólo cualidades discursivas a la hora de presentarse en sociedad.

Otros hitos fundamentales en la edición 2007 de GH fueron las confesiones que algunos hicieron sobre su vida privada. En ese contexto, Sebastián Pollastro se llevó todo los galardones. Ni bien entró declaró su homosexualidad (emulando al mítico Gastón Trezeguet) y, meses más tarde, contó que fue abusado a los ocho años. Toda una revelación.

También Diego confesó que estuvo preso y Jonathan que no veía a su padre. Hasta Silvina, “la profe” dejó trascender que cuando abandonara la casa iba a revelar cosas fuertes de su vida. Pero eso nunca ocurrió. O se arrepintió o no tenía nada para decir.

Curiosamente, o no tanto, las dos chicas que llegaron a la final (Marianela y Mariela) fueron las que mayor cantidad de veces estuvieron nominadas.
Curiosamente, o no tanto, las dos chicas que llegaron a la final (Marianela y Mariela) fueron las que mayor cantidad de veces estuvieron nominadas. En otros casos, como el de Gabriel o Jonathan, la primera vez que fueron a la placa, quedaron afuera.

En este contexto, y justo en la última nominación, Marianela (¿gran estratega, traidora o demasiado impulsiva?) le dio tres puntos fundamentales que pusieron a Diego en el banquillo.

¡Socorro, hay un helicóptero en la casa!

Un hecho que tuvo mucha repercusión fue el paseo en helicóptero de la periodista chimentera Viviana Canosa por encima de la casa. En un programa especial, la conductora le arrojó pancartas a Diego Leonardi (quien había dicho que tendría sexo con ella) e intentó mantener algún contacto con los chicos.

A todo esto, una desconocida voz de GH (entre afónica y nerviosa) ordenó a los participantes del juego que ingresen en el Sum e inmediatamente el canal 15 y todos los canales de la Web en los que se podía ver 24 horas, fueron cortados.

Famosos con Gran Hermano: un aislamiento dudoso

Otro punto que distinguió a esta versión del reality tuvo que ver con que no fueron pocos los famosos que pasaron por la casa, aunque mal no sea un par de horas. Entre otros, el cantante y bailarín Chayanne entró y, además de mencionar cada tres palabras su nuevo disco, les dejó una pizza. También Ricardo Montaner y Coti Sorokin cantaron para los chicos en sendos shows. En el caso de Montaner los participantes cantaron con él, en el de Sorokin no.

En el programa “GH: El debate” tuvo varias figuras invitadas. Samuel “Chiche” Gelblung estuvo analizando, junto a los panelistas y a los integrantes ya expulsados, cómo estaba la casa en ese momento.

Por su parte, Tusam (hijo) realizó un interesante show en el que, entre otras cosas, hizo que Juan se acueste sobre clavos. Varios días antes el mago Norberto Jansensson también había realizado algunos trucos.

Finalmente el programa “GH: El debate” (en el que se destacó Mariano Peluffo) y algunos de los especiales tuvieron a varias figuras invitadas. Samuel “Chiche” Gelblung estuvo analizando, junto a los panelistas y a los integrantes ya expulsados, cómo estaba la casa en ese momento y desentrañó algunas cuestiones vinculadas al comportamiento humano.

Por su parte, Karina Rabolini, la esposa del vicepresidente Daniel Scioli, participó en un especial en el que los participantes debían desfilar después de haber confeccionado sus propios diseño de ropa.