Las importaciones de zapatos y zapatillas procedentes de China y el sudeste asiático crecieron un 74 por ciento entre enero y mayo de este año respecto al 2005, y encendieron una luz de alarma entre los fabricantes locales, que pidieron auxilio al gobierno.

Por ese motivo, el secretario de Industria, Miguel Peirano, recibió esta mañana a directivos de la Cámara de la Industria del Calzado, encabezados por el titular de la entidad, Alberto Sellaro.

Sellaro le dijo a Peirano que las importaciones chinas constituyen una "competencia desleal y un riesgo para el aumento de las inversiones y el desarrollo de la producción local".

"Esto acarrearía, también, graves consecuencias en la estabilidad laboral del sector que cuenta con 52 mil trabajadores en forma directa e indirecta", destacó Sellaro, según informó la entidad.

El empresario le indicó al titular de Industria que de acuerdo con datos recogidos por la Cámara, desde el 1 de enero de 2006 se importaron, de China y sudeste asiático, más de 2 millones de pares, un 74 por ciento más respecto a igual periodo de 2005.

Mientras tanto, el ingreso de Brasil fue de más de 4,2 millones de pares, cifra levemente superior a la registrada durante el año pasado, según la entidad.

Ante esta situación, Peirano se comprometió a continuar con el monitoreo del ingreso de calzado brasileño, a través del mecanismo de licencias no automáticas, y aseguró pondrá un cuidado especial en las importaciones de calzado chino.

Adicionalmente, en Industria se está analizando la viabilidad de un mecanismo de control al ingreso de partes superiores de calzado (capelladas), cuya importación aumentó significativamente, y a precios bajos.

"Esto amenaza la continuidad del empleo de mano de obra, por ser las capelladas el componente con mayor valor agregado del producto final", señaló Sellaro.

El empresario destacó que la industria del calzado nacional "posee una gran capacidad productiva, tecnología de última generación, mano de obra especializada y está conformada principalmente por empresas pymes que son flexibles a los cambios en la demanda interna e internacional".