El último piano que tocó John Lennon y el disco que el ex Beatle dedicó a Mark Chapman, quien horas después de recibirlo se convertiría en su asesino, fueron puestos a la venta en Nueva York. Por el instrumento, la empresa estadounidense Moments in Time, dedicada al coleccionismo de documentos y objetos históricos, pide 375.000 dólares. Por el álbum, en cambio, no hay un precio establecido.

El piano pertenecía a los estudios Record Plant de Manhatan y fue utilizado por Lennon para las sesiones de "Imagine" y para componer temas junto a Elton John y David Bowie. Su sonido se puede oír con claridad, por ejemplo, en el tema "Watching the wheels" del álbum "Double Fantasy", que el ex Beatle publicó en 1980 junto a su mujer, Yoko Ono.

Es precisamente una copia de ese álbum la que Lennon dedicó a su asesino el día de su muerte, y que se convirtió en una prueba contra Chapman, ya que conservaba sus huellas dactilares.

"El piano estaba en el estudio en su último día de vida, que lo pasó conmigo en la sala de mezclas trabajando en la canción 'Walking on thin ice'. Antes de irse, tocó el piano durante unos minutos", contó Jack Douglas, un productor que trabajó junto a Lennon, en una carta que Moments in Time adjunta a la venta.

"John Lennon se enamoró de este piano por su sonido nostálgico desde el momento en que llegó a los estudios para las sesiones de 'Imagine'. Desde entonces lo utilizó para componer y grabar nuevas canciones", explicó Gary Zimet, encargado de la venta del instrumento.

Douglas aseguró que el piano también pasó por las manos de Bob Dylan, Don Mac Lean, Patty Smith y Lou Reed, aunque siempre recibió el nombre de "el piano de John Lennon" en los estudios neoyorquinos donde estuvo hasta la década de los noventa, cuando éstos desaparecieron.