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Obama, la sorpresa política que puso en jaque a Hillary
Afroamericano, carismático y popular casi como una estrella de rock, el precandidato demócrata es un escollo difícil para la carrera presidencial de la ex primera dama
5 de julio de 2007
La campaña electoral en EE.UU. empieza a tomar forma y, mientras Barack Obama logra imponerle a Hillary Clinton un combate cuerpo a cuerpo -algo impensable hasta hace poco entre los demócratas-, la próxima entrada en campaña del actor Fred Thompson puede cambiar el panorama entre los republicanos.

El previsible debut del ex senador y actor esporádico Thompson, que se prevé se materialice en las próximas semanas, es ampliamente esperado por gran parte de los conservadores estadounidenses, que confían en que sirva para movilizar a unas bases poco entusiasmadas con las opciones actuales.

Las diferencias en la recaudación de fondos electorales son un buen reflejo del buen ánimo de los demócratas.

El diario «The Washington Post» recordó ayer que Obama ha recibido dinero de 258.000 contribuyentes, más que el total combinado del ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney, el ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani y el senador por Arizona John Mc-Cain, que encabezan la lista de presidenciables republicanos.

Obama, un afroamericano carismático y con una popularidad similar a la de una estrella de rock, ha batido a todos sus contendientes en el segundo trimestre, al recibir donaciones por 32,5 millones de dólares, por encima de los 27 millones de Hillary, los 20,5 de Romney, los 17 de Giuliani o los 11 de McCain.

El senador por Illinois, que avanza a velocidad de crucero pese al lastre de su reducida experiencia política, amenaza las ambiciones de Hillary Clinton, que, bajo presión, ha debido recurrir a su todopoderoso marido.

El ex presidente Bill Clinton, que durante los últimos días ha hecho de «telonero» de Hillary en el estado de Iowa, donde se celebrará el primer «caucus» o reunión de electores para elegir a los delegados que irán a las convenciones nacionales de los partidos en las que se decidirá el candidato presidencial, parece dispuesto a gastar todo su capital político en favor de su esposa.

Sea como sea, las abultadas arcas de Obama y Hillary marcan un cambio de fortuna para los demócratas, a quienes tradicionalmente les ha tocado pelearse por la Casa Blanca peor pertrechados económicamente que sus rivales republicanos.

De ahí que los conservadores esperen ansiosos el debut de Thompson, a quien algunos han bautizado ya como el heredero de Ronald Reagan (1981-1989), un presidente que continúa disfrutando de estatus de superhéroe en EE.UU.

Thompson, que fue senador por el estado de Tennessee entre 1994 y 2002, se perfila como una figura política creíble, con un nombre conocido y buenas expectativas en las encuestas pese a no haberse presentado todavía oficialmente.

Distintos observadores señalan que tiene la capacidad para atraer a muchos de los votantes de la base conservadora del Partido Republicano, a los que no han logrado inspirar ninguno de los tres principales aspirantes en liza.

A diferencia de Giuliani y Romney, el ex actor de la serie de televisión «Law and Order» se ha opuesto siempre al aborto y defiende el derecho a tener armas.

Por otro lado y pese a votar a favor de la guerra de Irak en 2002, no se lo vincula tan estrechamente con el desastroso conflicto como al senador McCain.